«Toda la vida hubo un control de los lobos y no se exterminaron»

-¿Qué preparan para celebrar este cincuentenario?

-Los actos van a empezar la semana que viene y hasta el día del certamen habrá cosas. El programa no está cerrado del todo.

-¿Qué supuso el certamen para el queso Cabrales?

-Es el día de fiesta, en el que nos juntamos gran parte de los elaboradores y en el que se elige el mejor queso. Estos años, con la puja tan importante que hubo, fue un reconocimiento. Fuimos dos años récord Guinness y eso ayuda a ser más conocidos.

-¿No es paradójico que desde las administraciones se promocione el Cabrales y a la par se proteja al lobo?

-Dicen que hacen todo lo posible, pero llevamos así muchos años. El problema de incluir el lobo en el Lespre (Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial) no lo vamos a ver este año, sino el que viene y los siguientes, cuando procreen y aumente cada vez más. El problema se va a agravar, pero es que llevamos con él muchos años. No se hacían los controles suficientes. Si cuando se podía, se hubieran hecho las cosas bien, ahora igual estaba un poco a raya. El queso Cabrales lleva perdiendo pastores y cabras y ovejas desde hace muchos años. Así estamos como estamos, que prácticamente lo que queda es ganadería en intensivo y de vaca.

-¿Está en peligro la utilización de las tres leches?

-Claro que está en peligro, de reciella no hay prácticamente nada. Vamos a ir a la ganadería en intensivo y lo que necesitamos es en extensivo. Si no, esto va a ser una selva en cuatro días. Parte de los caminos ya están intransitables, no entran ni las cabras porque las árgumas llegan por la cintura. El día que caiga una chispa y haya un incendio lloraremos y nos echaremos las manos a la cabeza. Está en nuestras manos no tener incendios y la única manera es que haya ganadería en extensivo que limpie. Esto es un círculo y se rompió.

-¿Por qué no sirven en los Picos las medidas preventivas que se plantean?

-¿Qué vas a cerrar aquí en la peña? ¿Cercamos toda Asturias y dejamos los lobos por fuera? Es absurdo, pero sí lo hacen, encantada. Los cercados eléctricos no son la solución, las cabras quieren subir arriba. En cuanto a los mastines, metí tres y ahora el problema que tengo es con el turismo, que viene con los perros sueltos. Los mastines defienden el rebaño y eso trae problemas. No podemos llenar todo de perros. Yo no veo más opción que hacer un control, lo que hicieron nuestros abuelos, nuestros bisabuelos... Toda la vida hubo lobos y un control y no se exterminaron. Aquí siguen.

-Tras el incremento de los costes, ¿se prevé una subida de los precios del queso?

-Cada elaborador tendrá que echar cuentas. Como yo lo tuve que subir, imagino que los demás hayan tenido que hacer lo mismo porque sube la luz, los impuestos, el gasoil, el cartón, el papel con el que envolvemos, la leche por los piensos... O lo subes o dejas de ganar dinero. Además, este queso da muchísimo trabajo y tienes que poner en valor todo eso. Barato se me hace a lo que está, porque ves en supermercados Cabrales a trece euros y te da la risa. Es inviable.

-¿Falta relevo generacional?

-Somos 23 elaboradores y no veo a nadie interesado en montar una quesería. Da vértigo seguir bajando, sería muy importante el relevo generacional. Sé que es un trabajo duro y sacrificado y empezar de cero no es fácil. Yo lo hice y sé lo que es, pero el que tenga ganas de trabajar lo puede hacer. Hoy en día montar cualquier negocio es arriesgado

-¿Qué necesidades tienen en cuevas e infraestructuras?

-Cuevas tenemos, el problema es el acondicionamiento. Nos faltan caminos, carreteras, agua... Estamos hablando constantemente con la administración. Nos prometieron un cable para una cueva en Tielve, la del Teyedu, hace seis años. Había un proyecto, pero el cable para transportar los quesos y el agua no llegó. Queremos alimentos de calidad, pero luego nos encontramos con esos problemas. En otras cuevas falta agua y estamos trabajando con Montes. En otra que tenemos y que se arregló el acceso nos falta poner unas puertas y acondicionar un poco. Esperamos poder abrirla este año.