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OLAYA SUÁREZ / LUCÍA RAMOS
Jueves, 21 de febrero 2019, 03:47
La Guardia Civil tiene pruebas que posicionan el vehículo de uno de los supuestos sicarios en Llanes el día del crimen, el 16 de agosto. Los investigadores consiguieron afianzar sus sospechas con varias evidencias que estarían avaladas por las imágenes de cámaras de ... tráfico. Para ello, se analizaron de forma pormenorizada cientos de horas de grabaciones del concejo de Llanes y de la autovía del Cantábrico entre Pría y Bilbao, donde residían los dos ciudadanos argelinos que presuntamente ejecutaron el plan urdido por Pedro Nieva para liquidar a su primo político por los celos que tenía por una supuesta relación con su mujer. Queda por determinar el abono y la contraprestación que recibirían por el trabajo encargado por el inductor.
Lo que sí está claro para la Guardia Civil es que el coche de uno de los argelinos estuvo en Pría de Llanes. Por ese motivo, el vehículo, incautado en Bilbao el martes tras el arresto del propietario es una de las piezas claves de las pesquisas policiales. Los agentes confían en que aporte datos reveladores, como pruebas biológicas de la víctima. No se puede descartar que los presuntos sicarios hayan introducido en ese turismo, de marca Citroën, las vallas con las que luego le cortaron el paso a su objetivo.
Ese vehículo centró ayer las pesquisas del Servicio Cinológico de la Guardia Civil procedentes de Madrid. Los guías caninos, con sus inseparables perros altamente cualificados para la localización del más mínimo vestigio y rastro de ADN intervinieron durante prácticamente toda la mañana en los dos turismos. En el de los presuntos sicarios se centraron de forma minuciosa, ya que es el que consideran que pueda aportar más datos para el esclarecimiento del crimen.
El Servicio Cinológico se desplazó a Llanes el martes, en cuanto se materializaron las tres detenciones en Amorebieta y Bilbao. Estaban listos para intervenir en cualquier momento. Como así fue. Ayer, a primera hora de la mañana, en el cuartel de la Guardia Civil, comenzaron las labores, en el interior del garaje en el que se custodian los vehículos y en el que previsiblemente permanezcan hasta que se dé por descartado que no se puede conseguir ninguna prueba más.
Los restos recopilados por la Brigada de Criminalística con la ayuda de los perros especializados serán enviados a los laboratorios centrales de la Benemérita. No será hasta que se conozcan las conclusiones de esos exámenes cuando se compruebe si las inspecciones en alguno de los dos vehículos han tenido resultados positivos para las investigaciones. El Citroën en el que presumiblemente se desplazaron los sicarios contratados podría ser una de las claves para apuntalar una minuciosa investigación que se ha prolongado durante seis meses y ahora toca a su fin.
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