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E. R.
GIJÓN.
Martes, 3 de noviembre 2020, 02:22
Un grupo de padres instó ayer a las familias, a través de una red social, a secundar una huelga de siete días -del 3 al 10 de noviembre- y no llevar a los hijos al colegio para cumplir, así, con el confinamiento domiciliario que ... propone el presidente del Gobierno autonómico, Adrián Barbón, y que ha sido denegado por el ministro de Sanidad, Salvador Illa. «Debemos estar todos a una y no llevar a nuestros hijos al colegio a partir de mañana y, al menos, durante una semana», sostienen los impulsores de la iniciativa. «Debemos hacer voluntariamente un confinamiento domiciliario para que se cumplan las restricciones pedidas por nuestro presidente -añaden-. Cuando se hace mal, se dice, pero si le niegan nuestra protección, se le apoya».
Se da la circunstancia de que una parte de las familias que han decidido sumarse a esta medida fue muy crítica con el Gobierno regional durante todo el verano cuando era firme defensor del modelo totalmente presencial en todos los niveles. El Ministerio de Educación y el Gobierno asturiano recordaron entonces «la obligación de acudir al aula -la educación es obligatoria de los seis hasta los dieciséis años- y cumplir con este derecho fundamental» de los menores. La propia Fiscalía asturiana advirtió de que actuaría contra los padres que no lleven a sus hijos al colegio y Educación ha vuelto a manifestar que vigila el absentismo desde el primer día de clase.
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