El secreto no era tanto, puesto que el nombre de Nieves Roqueñí como sustituta de Laureano Lourido en la Presidencia de El Musel ya lo había publicado hace semanas EL COMERCIO. Pero al presidente del Principado, Adrián Barbón, le gusta marcar ... los tiempos a la hora de tomar decisiones de tanta enjundia como esta, que conlleva además una remodelación en toda regla del Gobierno. Por eso, el martes pasado afirmó de forma rotunda que «a día de hoy no tengo ninguna decisión tomada» y descartó que esos cambios se fueran a tratar en el Consejo de Gobierno de mañana: «Este viernes no va a haber ningún nombramiento, descarten cualquier noticia al respecto», dijo, tajante, entonces. Setenta y dos horas después, todo cambió. Adrián Barbón anunció ayer la salida del Gobierno de Roqueñí porque será la próxima presidenta de la Autoridad Portuaria de Gijón y, por ello, acometerá la segunda remodelación del Ejecutivo en algo más de año y medio: la actual directora general de Minas y Energía, Belarmina Díaz, coge el testigo de Nieves Roqueñí y será la próxima consejera de Transición Ecológica. Eso sí, estos cambios no se adoptarán en el Consejo de Gobierno, sino que serán efectivos en la reunión del próximo 14 de febrero.
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Con este nombramiento, Barbón refuerza su política industrial y pone al frente de este área a quien lleva siete años al frente de la Dirección General de Minería y Energía, aspectos que serán clave en lo que queda de legislatura, donde debe ponerse en marcha la ordenación de los parques eólicos y de baterías e impulsar la reindustrialización de la región.
Además, se trata de un movimiento que puede tener consecuencias en el Gobierno de coalición, ya que a los socios del PSOE, IU-Convocatoria por Asturies, la elección de Díaz no les agrada, ya que consideran que supone un cambio en la política industrial del Ejecutivo autonómico que no comparten. De hecho han convocado de urgencia a sus órganos de dirección política para analizar este nombramiento.
Además, aprovechando esta remodelación, Barbón también anunció el cambio de denominación de tres consejerías: Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico pasará a ser Transición Ecológica, Industria y Comercio; Hacienda y Fondos Europeos pasará a ser Hacienda, Justicia y Asuntos Europeos y Fomento, Cooperación Local y Prevención de Incendios pasará a ser Movilidad, Cooperación Local y Gestión de Emergencias.
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¿Qué ha pasado para que en menos de 72 horas el presidente del Principado haya cambiado de decisión? La presión que desde múltiples ámbitos –tanto políticos, como municipales, empresariales y sindicales– se estaba tratando de hacer para que la decisión se tomara de inmediato. «He adelantado la decisión para poner fin a la rumorología», dijo ayer el presidente del Principado.
La opción de Nieves Roqueñí como sustituta de Lourido estaba clara desde el inicio. Cuando se supo de la dimisión del presidente del Puerto se plantearon dos nombres como candiudatos: Alejandro Calvo, hombre de confianza de Adrián Barbón y de la delegada del Gobierno, Adriana Lastra, quien también es miembro del consejo de administración de El Musel, y el de la titular de Transición Ecológica. No obstante, el consejero de Fomento rápidamente se cayó de las quinielas, ya que se buscaba un perfil más técnico que político y, sobre todo, una mujer, para continuar con la alternancia en la Presidencia de la Autoridad Portuaria de Gijón que ha venido produciéndose.
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Comenzaron pues las presiones, pidiendo que el nombramiento se hiciera lo más rápido posible, evitando un proceso largo que no haría más que provocar incertidumbre. Pero a Barbón, como decíamos anteriormente, le gusta marcar sus propios tiempos. Y en este asunto consideraba que había que esperar para hacerlo efectivo. Primero, porque enviar a Roqueñí a El Musel implica buscarle un sustituto en su consejería. Desde el primero momento pensó en Belarmina Díaz, número dos de Roqueñí, como el relevo natural, aunque también barajó la opción de llevar a esa consejería a Alejandro Calvo. No obstante, esta opción la descartó porque supondría buscarle sustituto en Fomento, que debería ser, además, mujer para garantizar la paridad del Gobierno. Segundo, la demora se produjo porque cuando quedó vacante la presidencia de El Musel la FSA se encontraba en pleno proceso congresual –el cónclave se celebró el tercer fin de semana de enero en Avilés– en el que el presidente fue elegido secretario general por tercera vez y en el que, además diseñó una ejecutiva con grandes cambios. Y tercero, porque aprovechando la salida de Roqueñí del Gobierno meditaba una reorganización más amplia, no de personas ni de estructura, sino de nombres de las mismas.
Y así lo ha hecho. De esta forma, Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico pasará a ser de Transición Ecológica, Industria y Comercio. En este caso, se le da más relevancia a la atención al comercio. Hacienda y Fondos Europeos pasará a ser Hacienda, Justicia y Asuntos Europeos. Con este cambio, la denominación «refleja mejor el ámbito de actuación» de la consejería, explicó ayer Barbón.
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Fomento, Cooperación Local y Prevención de Incendios pasará a ser Consejería de Movilidad, Cooperación Local y Gestión de Emergencias. La prevención de emergencias cobra especial atención. El presidente confirmó ayer que próximamente se realizarán nuevos simulacros de emergencias en el suroccidente y el resto del territorio del Principado.
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