El fíu de 'La Capitana' que quería curar vidas, pero sana almas

«Yo siempre le he dicho que los talentos que Dios le dio no son para enterrarlos, sino para darlos a los demás. Como madre, sé lo que vale». Isabel Artime es mucho más que la progenitora del Hijo Predilecto de Asturias 2024. Ella es Isabel, 'La Capitana', la mujer que vendía en su pescadería de Luanco cada día lo que su marido pescaba cada noche. La que permitió que su 'Angelín' se fuera, con diez años, a estudiar a los Salesianos de León, decisión que trocó, en parte, la voluntad de su hijo. El guaje que quería ser médico y curar vidas acabó convirtiéndose en sacerdote para sanar almas. Se ordenó sacerdote en León en julio de 1987. Y rompió, uno tras otro, los techos de cristal de la Iglesia asturiana.

Así, Ángel Fernández Artime (Gozón, 1960), además del fíu de 'La Capitana' es licenciado en Filosofía, Pedagogía y Teología Pastoral, ha sido el primer español en convertirse en rector de los Salesianos.

Y también ha sido el primer superior de una congregación religiosa en ser nombrado cardenal. Y el primer cardenal elegible sin ordenación episcopal desde Roberto Tucci en 2011. Y amigo personal de Jorge Mario Bergoglio, el arzobispo de Buenos Aires en 2009 cuando el gozoniego fue nombrado provincial de la Inspectoría Argentina Sur. Lo que es lo mismo que decir que es amigo personal del Papa Francisco. Un suma y sigue de cargos que aglutina el que es hoy el séptimo asturiano elegido cardenal, nombrado hace justo un año.

Con todo, Ángel Fernández Artime es un sacerdote que sigue teniendo alma de profesor y que desde el pasado mes de octubre forma parte del Dicasterio para los Institutos de vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica de la curia romana. Una labor en la que muestra su práctica de años, ya que fue el director del colegio de los Salesianos de Orense y, sobre todo, profesor en el Colegio Santo Ángel de Avilés.

El cardenal, que no podrá estar hoy en la ceremonia que le convertirá en Hijo Predilecto del Principado, recuerda siempre sus orígenes, marcados por la mar y el duro trabajo diario. Él mismo compartió tareas con su padre, puesto que en casa todo el mundo tenía que aportar su granito de arena para salir adelante.

Una experiencia vital la de la pesca que hacen que, 'Angelín', el fíu de 'La Capitana', lance una y otra vez la red católica para sumar fieles a la religión católica. Y, también, la red asturiana, para vender sin fin «mi gente, mi tierra, a la que cada vez vuelvo más».

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