Faustino Blanco deja, al mes de asumir el cargo, la dirección de la Finba

La renuncia de Faustino Blanco llega después de que el sindicato Sicepa criticara abiertamente la retribución aparejada a su nuevo cargo: una cantidad fija de 85.000 euros brutos anuales y otra variable de hasta 25.000. La cifra total, esos 110.000 euros, es prácticamente el doble de lo que cobraba su antecesor y, a juicio del sindicato Sicepa, «una indecencia». El nombramiento del médico gijonés, que tras salir del Ministerio de Sanidad en agosto tenía previsto volver a su plaza en el centro de salud de El Coto, también fue puesto en tela de juicio por el grupo parlamentario de Podemos. En una de las últimas comparecencias del consejero de Salud, el diputado Daniel Ripa interrogó a Pablo Fernández sobre esta cuestión. En concreto por quién había decidido su designación. A su entender, podía haber cierto conflicto de intereses en ello. «No lo voy a definir como puerta giratoria, pero bueno...», dejó caer Ripa tras recordar que fue precisamente Blanco quien, siendo consejero de Sanidad del Principado, impulsó y promovió una «inversión millonaria» para poner en marcha la Finba.

El nombramiento de Faustino Blanco como director de la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria, una entidad sin ánimo de lucro creada en 2014 a iniciativa de la Consejería de Sanidad del Principado, en la que participan la Universidad y el Ayuntamiento de Oviedo, pero en la que es mayoritaria la parte privada (con varias de las principales empresas de la región como patronos), tuvo lugar el pasado 10 de noviembre. Tanto su nombre como la retribución como director fueron propuestos por el presidente del patronato, Blas Herrero, y aceptados por unanimidad por todos los patronos en sendas reuniones celebradas el mes pasado.

Su renuncia, al margen de la polémica por su sueldo, llega en un momento muy delicado para la Fundación, el paraguas del Instituto de Investigación Biomédica y Sanitaria en el Principado(Ispa) bajo el que trabajan cerca de 800 investigadores y para el quese tenía previsto este mes de diciembre formalizar la petición de acreditación por el Instituto Carlos III, objetivo que se persigue desde su creación. La idea, había confirmado el propio Faustino Blanco en una entrevista a El Comercio tras su nombramiento, era presentar la solicitud «en la primera quincena de diciembre».