Fallece una vecina de Lugo de 52 años al caer su coche por un acantilado en Tapia

Una vez en el lugar, los bomberos del parque de Barres comprobaron que el humo procedía de un vehículo que se encontraba ardiendo en una zona rocosa, a unos veinte metros de distancia de la mar, y con la puerta del lateral del conductor abierta. En el interior no había rastro de ninguna persona, pero sí objetos personales.

Fue entonces cuando comenzaron una búsqueda en los alrededores para dar con el paradero del posible propietario. Finalmente, encontraron el cuerpo de la mujer lucense flotando en el agua, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos y del helicóptero de Emergencias de Asturias para el rescate. Asimismo, se movilizó a una grúa para extraer el vehículo completamente calcinado del acantilado.

Hasta el lugar del suceso también se desplazaron una patrulla de la Guardia Civil del puesto de Tapia, los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y de la Policía Judicial de Luarca. Por el momento, las investigaciones para determinar las causas del fallecimiento siguen su curso.

La mujer residía en el municipio gallego de Cervo. Desde hace dos décadas trabajaba para el Ayuntamiento como empleada del servicio de ayuda a domicilio. Su muerte ha provocado tanto en el Consistorio como en la calle una honda conmoción dado que era una vecina muy conocida y apreciada.