Fallece una motorista de Langreo al salirse de la vía e impactar contra el quitamiedos en Tineo

La carretera entre La Espina y Tineo se cobró ayer otra vida. En esta ocasión, la tragedia golpeó al grupo de moteros que, durante su travesía por el suroccidente, perdieron a una de sus integrantes en el asfalto. Ocurrió por la tarde, en torno a las 17.30 horas. A esa hora, el Servicio de Emergencias del 112 trasladaba el aviso a la Guardia Civil. Por circunstancias que se están investigando, María del Mar Donate Barreiro, de 50 años y vecina de Langreo, se salió de la vía y chocó contra el quitamiedos en el kilómetro 0,600 de la carretera AS-216. Su marido iba el mismo grupo, a los mandos de otra moto, en el momento del accidente.

Hasta el lugar del suceso -una significativa curva a la entrada de la localidad La Pereda- se trasladó el Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU), así como cuatro patrullas de la Guardia Civil de Tráfico de la zona, que custodiaron el cuerpo sin vida de la mujer hasta la llegada del forense y la autoridad judicial. El cadáver de la mujer fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde a lo largo de la jornada de hoy se le realizará la autopsia.

Aunque se están investigando las posibles causas, una de las posibles hipóstesis es que María de Mar pudo haber perdido el control tras patinar su moto con la pintura de la señalización de la carretera, una vía limitada a cincuenta kilómetros por hora. «No es una carretera que sea estrecha o esté especialmente, en malas condiciones. De hecho se implementó la señalización recientemente, ya que discurre entre muchos cruces de población», apuntó el alcalde de Tineo, José Ramón Feito, quien lamentó «esta nueva fatalidad», que se suma al fallecimiento de Luscinda Mon en noviembre pasado, tras ser aplastada por un argayo en la AS-15 a la altura de Soto de la Barca.

La AS-216 atraviesa localidades como La Pereda, La Millariega o el Pedregal, contando en la zona con «importantes ganaderías y empresas». También da acceso al polígono industrial de La Curiscada. La AS-216 soporta «un importante volumen de tráfico».

La realidad es que esta carretera se ha convertido en una de las vías con mayor más siniestralidad en los últimos años. Tres heridos en una colisión a la altura de Las Pontigas, a principios de noviembre del 2020; dos heridos en un choque de vehículos en La Millariega en febrero de 2021, y otro motorista, -herido grave con fractura abierta de tibia y peroné-en El Pedregal, en marzo, representan solo algunos de los desgraciados sucesos. Solo en la primera mitad del pasado año, la vía registró tres accidentes.

Uno de ellos costó la vida a Lorena Pérez, una joven de 39 años, natural de Muñás, en el concejo de Valdés. El aparatoso accidente -en el tramo que une La Millariega y El Pedregal, en dirección a Tineo-, culminó un mes de marzo negro para los vecinos de la comarca. En una de las curvas, un Volkswagen Tuareg impactó contra el vehículo en el que viajaban la joven y su pareja. Los vecinos, que presenciaron el accidente, se colocaron entonces el chaleco y regularon el tráfico antes «de la peligrosa curva» para evitar la implicación de otros vehículos en el siniestro.

Aunque la limitación es clara, los vecinos insisten en el control de la velocidad. La cuestión fue, el pasado año, materia de Pleno municipal en el concejo, cuando los populares propusieron la instalación de semáforos para ejercer un control directo sobre la velocidad de los vehículos. La AS-216 es, asimismo, una de las vías para las que la Cohesión Territorial anunció inversiones este mismo año.

• Temas
• Langreo
• Tineo
• Accidentes de tráfico en Asturias