Un estudio relaciona el uso de vapeadores con un mayor riesgo de consumir cannabis

Los adolescentes y los adultos jóvenes que utilizan cigarrillos electrónicos tienen tres veces más probabilidades de pasar a la marihuana que los que nunca han vapeado, según un reciente estudio. «Los jóvenes y sus familias a menudo consideran que los cigarrillos electrónicos son benignos o inofensivos», sin embargo, «deben considerarse dañinos, de manera similar a otras sustancias como el alcohol y el tabaco, que también se han asociado con un mayor consumo de marihuana», explicó a Reuters Nicholas Chadi, autor principal del estudio y profesor asistente de pediatría en el Hospital Universitario Sainte-Justine de la Universidad de Montreal en Canadá.

Hace años que la extensión del uso de estos dispositivos en Norteamérica ha dado lugar a múltiples estudios. Una veintena de ellos, en los que participaron más de 128.000 adolescentes y jóvenes de menos de 24 años, fueron los utilizados en este último informe que corrobora que los que usaban estos dispositivos de vapeo tenían 3,5 veces más probabilidades de consumir marihuana. El riesgo aumenta cuanto menor es la edad del fumador.

Y eso, explica el neumólogo Manuel Ángel Martínez se explica porque a esas edades el cerebro está aún desarrollándose y es más fácil convertirse en adicto a la nicotina. Porque esas sustancias está en la mayoría de los cigarrillos electrónicos, que «se venden con la idea que son más sanos, pero no es cierto. Llevan nicotina y ésta produce mucha adicción», advierte. El jefe del servicio de neumología del Hospital San Agustín mencionaba ayer otra publicación, referente a un estudio realizado en Norteamérica, que relacionaba el uso de vapeadores con los problemas respiratorios que presentaban varios jóvenes. En España, donde su distribución comercial ha sido más reciente, «tendremos que espera unos cuantos años para conocer sus consecuencias», dice Martínez, convencido de que «las habrá».