La estación de Pajares abre una temporada de esquí tardía: «No nos aguantábamos más»

El director de Valgrande Pajares, Javier Martínez, comentó entusiasmado a EL COMERCIO, que pese a que la apertura se retrasó más de lo previsto «se espera una buena temporada, porque la gente tiene muchas ganas de recuperar el tiempo perdido» y agregó que «hoy vino muchísima gente y hay bastante más nieve de la que esperábamos, con espesores de 35 a 75 centímetros, aproximadamente».

En una estación, la de Pajares, que el miércoles de la próxima semana va a cumplir 70 años de funcionamiento (se abrió por primera vez el 17 de enero de 1954), su actual director, Javier Martínez, afirmó que «ya hay vendidos unos 900 abonos de temporada, a pesar de todo, es una muy buena cifra. Hemos abierto con 14 kilómetros esquiables, 22 pistas y cuatro remontes disponibles». Los verdaderos protagonistas de la jornada de ayer fueron los esquiadores. Desde todas partes de Asturias llegaron a Pajares desde muy temprano para aprovechar el día; uno, por cierto, muy frío y con temperaturas heladoras, que rozaron los ocho grados bajo cero. «Son muchas ganas, la verdad que esperamos bastante esta temporada, ya no aguantábamos más, y ahora, a intentar recuperar el tiempo perdido. Yo soy de Uruguay, y estoy acostumbrado a esquiar, aunque vivo en Oviedo, y desde hace varios años suelo venir a Pajares. Hay buenos niveles de nieve, por lo que, se espera una gran temporada», comentó Ignacio Rivela, vecino de Oviedo.

Otra habitual de Pajares, la llanisca Teresa Álvarez, anotó que «este año hemos tenido mala suerte, pero eso nos dio más ganas. Yo vengo aquí desde hace tres años, y esta es la primera vez que la apertura se retrasa tanto. El año pasado ya se retrasó un poco, pero esta vez ha sido más larga la espera. He visto mucha gente aunque creo que habrá algo más el fin de semana».

Otros, en cambio, fueron hasta Pajares simplemente porque es la estación que está abierta. «Vengo a esquiar aquí sólo cuando no están abiertas la de León, San Isidro. O Fuentes de Invierno, que son las dos donde suelo ir habitualmente. Venimos en grupo, en total somos unos 1.200 esquiadores en la asociación, y para nosotros es fundamental poder esquiar. Así que es un alivio que Pajares esté abierta, ya lo necesitábamos», subrayó Andrés Iglesias, vecino de Laviana.

Entre los primeros esquiadores que llegaron a Pajares ayer, también había personas mayores. Tal es el caso de Vicente Granel, que con más de 70 años, no se pierde una temporada. «Vengo a esquiar a Pajares desde los 14 años, así que imagínate, es toda una vida. Llevaba ya unos cuantos domingos con ganas de venir y añorándolo, así que estoy feliz», expresó el vecino de Gijón, acompañado de su hermano en la cafetería de la zona alta.

El retraso en la apertura de las estaciones de esquí en Asturias, cuyas tarifas están congeladas por tercer año consecutivo, ha causado desesperación entre los amantes de esta práctica. Tanto es así, que este domingo el aparcamiento de la estación de Fuentes de Invierno, pese a no estar en funcionamiento, se colapsó debido a la gran cantidad de personas que decidieron subir, aún sin que los remontes estuviesen en funcionamiento, y a la aventura, con la intención de esquiar 'sí o sí'. A la antigua usanza, cargando en muchos casos los esquís al hombro y emprendiendo la subida por las pistas para disfrutar, aunque fuera, de una primera bajada de una temporada que, una vez más, se ha retrasado mucho más de lo esperado para su inicio.

Asturias ha estrenado la semana con temperaturas bajo cero. Los registros más bajos se han dado en Leitariegos (-7,9 grados), seguido muy de cerca por Degaña (-7.8), Pajares-Valgrande (-6.6), Sotres (-4.2) y Pola de Somiedo (-3.5). La temperatura más alta, por el momento, se queda en los 11,2 grados registrados en Llanes.

Para los próximos días, el abrigo, los guantes y el paraguas seguirán siendo artículos de primera necesidad, ya que, según informa la Agencia Estatal de Meteorología, se prevén cielos cubiertos de nubes, precipitaciones moderadas y bajas temperaturas en general hasta el viernes. El miércoles será el peor día de la semana y se prevé que la cota de nieve baje hasta los 300-500 metros.

La nieve caída este domingo en buena parte de Asturias, más intensa hacia el oriente de la región, obliga a usar cadenas o neumáticos de invierno en los puertos de San Isidro y de Connio. Misma situación en las carreteras S-264 de Sotres y en la CO-4, que da acceso a los Lagos de Covadonga.

El domingo fue necesario usar cadenas tanto en la subida a Los Lagos como entre Sotres y la localidad cántabra de Tresviso. Y aunque en el resto de puertos de la región la acumulación de nieve en las calzadas fue menor que el día anterior, aún fue necesario emplear cadenas en los de San Isidro (Aller), Leitariegos (Cangas del Narcea); Tarna (Caso); alto de La Cobertoria (Quirós); Somiedo y San Lorenzo (Somiedo); y Ventana (Teverga). mientras que el de El Connio, entre Cangas del Narcea e Ibias, permaneció cerrado una jornada más.