Una enfermera del ERA recibirá 626 euros por daño moral al denegarle vacaciones

La enfermera había pedido las vacaciones en su centro de trabajo para las fechas comprendidas entre el 22 y el 31 de diciembre de 2018 e inicialmente se las concedieron, pero la víspera de su disfrute la llamaron por teléfono para comunicarle que quedaban suspendidas por «necesidades del servicio».

De este modo, la enfermera trabajó del 22 al 28 de diciembre y el 31 de diciembre y solo descansó los días 29 y 30 de ese mes, por lo que presentó una reclamación previa el 16 de enero de 2019 y, ante la falta de respuesta, demandó al ERA.

El juez reconoce en la sentencia, que es firme, que la enfermera solicitó las vacaciones «en tiempo y forma» y asegura que a la hora de confeccionar los calendarios del personal debería haberlo valorado y no denegárselo «de un día para otro, sin motivación alguna», como exige el convenio colectivo.

Además, el fallo resalta que el ERA ni siquiera acreditó en el juicio que no existiesen sustitutos de personal de enfermería en la bolsa de empleo, ni realizó gestión alguna tendente a la cobertura o sustitución de las vacaciones de la demandante.