«Nos encerramos con una mezcla de angustia y energía, queremos trabajar»

Rujas, que regenta el negocio La Botica de Carbayín, en Siero, quería estar con ellos, pero las limitaciones impuestas por los cierres perimetrales, no lo hacían factible.

«Al saber que ya se levantaban esas restricciones, me apunté. Me siento bastante animado y espero que gracias a esta acción podamos abrir pronto porque lo que queremos es trabajar». Rujas se lamenta de que «las ayudas no llegan y los pagos se suceden. «El ocio nocturno lleva cerrado demasiado tiempo», puntualiza.

La argentina Liliana Bermúdez, propietaria de la Sidrería El Carmen, en el barrio de La Arena que esta protesta es «el ejemplo de que hay que sacrificarse y salir de nuestra zona de confort para conseguir lo que perseguimos».

Ella considera que «esto servirá para que se puedan beneficiar todos los autónomos, que somos los grandes olvidados». Critica a «un gobierno que permite que el pueblo tenga que despertarse sin ganas, sin un incentivo», por eso ella se siente «superenergizada, porque somos un grupo que queremos hacer cosas, demostrar que lo que queremos es trabajar porque el trabajo es lo más importante para nosotros y hay gente que lo está pasando muy mal y hay que luchar por que eso acabe». Para ella, «existe un sentimiento de justicia, que es lo que nos motiva en este encierro».

«Ni nervios ni nada parecido porque no estamos haciendo nada malo». Así se expresaba el gijonés Jorge Blanco, propietario de La Terracina de El Coto, que puntualizaba que «estamos defendiendo lo nuestro».

Borja Gil, propietario de Parrilla Nueva Ibérica, en Río de Oro, no sabía qué metería en la bolsa «me la preparará mi mujer», bromeaba.

«Estaremos 15, 20 días o más. Espero que con esta actitud nos escuchen si es posible y entiendan que no nos pueden cobrar mientras sigamos sin trabajar» en alusión a las cuotas de autónomos. tasas e impuestos.

También su actitud es de «fortaleza» y sobre todo, espera que «podamos vencer al virus». El ecuatoriano Jenri William Álvarez, encargado del grupo La Marquesa, pide «un margen, que nos den salida».