La empresa de la ITV, abocada a pagar más horas extra para superar la huelga

Desde el lado de la plantilla, la protesta ha servido fundamentalmente para lograr un acuerdo de implantación de la jornada semanal de 35 horas. Actualmente está en 37,5 y la parte social reclamaba que, como al resto de personal público de las consejerías, se le redujera en esas dos horas y media y de manera inmediata. El Principado ofrecía aplicar las 35 horas, pero a partir de septiembre, una vez resuelto al actual atasco de inspecciones. Finalmente el acuerdo pasa por ir a las 35 horas en mayo, eso sí, vinculado a un incremento del número de inspecciones.

Esa condición genera dudas en la plantilla. «A mí que me expliquen por escrito qué dejo de revisar para ver más coches», señalaba ayer uno de los trabajadores. Lo cierto es que Asturias es la comunidad donde los conductores más suspenden la inspección en la primera visita, un 32%, lejos de la segunda, que está en el 21%. Esa proporción se viene asociando al celo con el que los inspectores hacen su trabajo, algo que tradicionalmente defendía la empresa como sinónimo de que aquí se logra un parque móvil más seguro.

Una de las paradojas del conflicto es que, una vez termine, el Principado tiene anunciado un plan de choque para agilizar la lista de espera. Las diez estaciones de ITVASA presentaban ayer una demora media de 107 días para dar cita previa, con casos como la base de Tremañes (Gijón) sin huecos hasta el 13 de septiembre. Tres estaciones ofrecían ahora algún horario disponible este mes, producto de que estaba reservado por conductores que finalmente pasaron la ITV en otra comunidad y comunicaron que su hueco quedaba libre.

Lo cierto es que el plan de choque implicará, en esencia, pagar más horas extra a la plantilla que con su paro provocó el problema de la lista de espera, permitiendo que recuperen así parte de las retribuciones perdidas por los días de protesta. En 2020, para ponerse al día tras otro paro, la solución pasó por adelantar una hora la apertura de las estaciones, a las 6.00 en vez de a las 7.00, y retrasar el cierre hasta las 23.00. El intento del Principado de ampliar la atención a los sábados desató un nuevo conflicto con la plantilla y tuvo que ser abortado.

Además de ampliar horario, existe la opción de incrementar la plantilla de cada turno, también retribuyendo a quien no tenía asignado ese horario. Las fuentes consultadas explican que parte de las estaciones disponen de espacio para abrir más líneas de inspección.

Uno de los principales motivos de la huelga, y que no ha logrado resultado para la plantilla, es la contratación de refuerzos. Al respecto, la posición del Principado siempre ha sido que la tasa de reposición impedía incrementar el personal, y que sólo podía hacer más contrataciones si abría nuevas estaciones, algo que proyecta hacer en Avilés, pero para lo que está aún buscando espacio.

El corsé que impone la tasa de reposición puede estar a punto de caer, toda vez que el ministro para la Transformación Digital y la Función Pública, José Luis Escrivá, tiene prometido acabar con dicho límite a partir de 2025 para iniciar un plan de rejuvenecimiento de las plantillas en el sector público. Es decir, la ampliación de plantilla no saldrá de este conflicto si se aprueba el preacuerdo del viernes, pero es un asunto que puede volver si decae el argumento jurídico que esgrimía el Principado.

Otro punto del acuerdo es pagar un plus de compromiso, de 75,21 euros al mes, condicionado a que la plantilla rebaje su nivel de absentismo.