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Asturias necesita diariamente unas 180 bolsas de sangre para atender la demanda de sus hospitales. De media, sin embargo, se colectan 150 unidades de componentes sanguíneos al día. De ahí que el Centro Comunitario de Sangre y Tejidos haya tenido que hacer varios llamamientos urgentes ... a la donación; el último, a finales de marzo, cuando empezó a escasear el grupo A+.
La generosidad de los asturianos ha permitido recuperar la reserva de sangre necesaria para sostener el sistema sanitario, pero «hay que seguir respondiendo a la demanda de los hospitales, que se encuentran en una fase de mucho consumo de componentes sanguíneos», incide Ana María Ojea, directora técnica del Centro Comunitario. Actualmente, se dispone de un stock de 850 concentrados de hematíes, con los que se podrá cubrir la actividad hospitalaria durante los próximos cinco días.
Es importante, según la doctora Ojea, que durante la Semana Santa no decaiga el ritmo de donaciones, como viene siendo habitual en los períodos vacacionales. «Necesitamos que la gente siga donando para mantener un stock de sangre adecuado», subraya. Que el Servicio de Salud del Principado (Sespa) haya intensificado la actividad quirúrgica tras la fase aguda de la sexta ola del coronavirus influye en esta mayor demanda que aprecian desde el Centro Comunitario de Sangre y Tejidos.
A eso se suman las urgencias no programadas, que durante el mes de marzo han sido muchas, elevando así la necesidad de sangre «por encima de lo que normal». Ana María Ojea explica que «en un mismo fin de semana se produjo un trasplante hepático, un politraumatismo y una hemorragia digestiva», lo que mermó las reservas de sangre, especialmente del grupo A+ y 0+, de forma preocupante.
Estos dos grupos sanguíneos son los que tienen una mayor demanda por parte de los hospitales, pero también son los más habituales entre los donantes. Lo contrario que ocurre con el tipo 0-, que corre por las venas de solo un 5% de la población y permite 'donaciones universales', es decir. «Hay que pensar que una persona dona una bolsa de sangre, pero en el hospital un enfermo puede requerir varias unidades de componentes sanguíneos», precisa la directora técnica del Centro Comunitario.
El objetivo de esta entidad sin ánimo de lucro es promocionar la donación, organizar colectas para su extracción y procesar los diferentes componentes: hematíes, plaquetas y plasma. El lunes, su junta rectora celebró una reunión presidida por el consejero de Salud, Pablo Fernández, para analizar la situación actual. De cara a Semana Santa está prevista una campaña de sensibilización para concienciar a los ciudadanos en la importancia que tiene para el sistema sanitario sus aportaciones altruistas, que «agradecemos mucho».
Este martes, se podrá donar sangre en la plaza del Ayuntamiento de Pola de Siero y de Avilés; frente a la Facultad de Medicina de la Universidad de Oviedo; y en la Asociación de Donantes de Sangre de Avilés. El miércoles, los dispositivos móviles de extracción también se situarán frente al Colegio Público San Cucao de Llanera y en el entorno de Puerta la Villa, en Gijón. «Debemos hacer acopio con cierto margen, siempre manteniendo el equilibrio entre las donaciones y las necesidades de los hospitales, que son altas, pero no lineales», apunta Ana María Ojea. Recordar que la sangre es un bien perecedero: «Dura mes y medio».
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