Asturias logró «los mejores resultados del último lustro» con casi 42.000 donaciones de sangre

Según explicó ella, «estamos en una actividad cercana a la que teníamos en 2019, por lo que es fundamental la labor de los donantes de sangre». Un elemento, recordó, que «pese a los últimos avances tecnológicos de los últimos años no hay otra forma de conseguir que con la donación». Un aumento de la demanda a los que puso números el presidente nacional: «Nosotros hemos crecido un 2% en donaciones, pero la demanda del Sespa lo ha hecho un 7%», lamentó Valdés. Una demanda protagonizada «por intervenciones quirúrgicas complejas, trasplantes y tratamientos oncológicos completos que sin la donación sería imposible realizar», explicó Saavedra. Ambos pusieron el foco en la necesidad más urgente «no solo aumentar donantes, sino aumentar el número de donantes jóvenes, necesitamos regenerar la donación», afirmaron.

El crecimiento de la demanda no oscurece, no obstante, el logró de las hermandades asturianas, «con los mejores resultados del lustro» logrados en 2022. Cerró el ejercicio la entidad con «41.698 bolsas, de las cuales 21.698 corresponden a la Hermandad de Donantes de Sangre del Principado», reseñó su presidente, Ernesto Marcos Antuña.

Fue él, que desde el año pasado sustituye a Faustino Valdés al frente de la entidad asturiana, el encargado de abrir la gran cita anual de los donantes, a los que agradeció «la solidaridad y generosidad». Pero, dejó claro «debemos seguir creciendo en número de donantes y donaciones, debido al aumento de la demanda hospitalaria». Y, tal y como habían hecho antes su antecesor en el cargo y la gerente del Sespa, el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre del Principado hizo un llamamiento específico «a los jóvenes, necesitamos más donantes jóvenes».

No obstante, la juventud sí está respondiendo a las llamadas a la solidaridad, ya que del 7% de incremento de donantes logrado el año pasado, «el 55% son jóvenes menores de 30 años», explicó Marcos Antuña. De los nuevos incorporados, la igualdad entre sexos es casi total, pero en el volumen de donaciones el rango de edad clona la pirámide poblacional del Principado: «El 52,7% corresponden al grupo poblacional entre 46 y 65 años, seguido del 28,9% que aportan los que tienen entre 31 y 45 años», enumeró el presidente de la entidad asturiana. «Los donantes de entre 18 y 30 años aportaron el 18,33%», por lo que considera que «debemos seguir trabajando en la captación de jóvenes, para que se unan a esta labor tan importante de la donación, porque cuando decimos que donar sangre es donar vida no es una frase hecha, sino una realidad», sentenció.