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P. SUÁREZ
GIJÓN.
Sábado, 11 de enero 2020, 01:57
Se habían convertido en un auténtico quebradero de cabeza y objetivo primordial para Guardia Civil y Policía Nacional y la investigación iniciada hacia varios meses ha recibido el golpe que abre la puerta a su desarticulación como grupo organizado. La conocida como banda del ... Seat León se ha visto cercada en las últimas semanas con una decena de detenciones practicadas por la Guardia Civil. Seis de sus miembros han caído; algunos incluso han sido arrestados en más de una ocasión por el mismo tipo de delito. Están acusados de cometer numerosos robos en locales de hostelería repartidos por toda la geografía asturiana. Oviedo, Gijón, Avilés, Llanera, Corvera, Siero... Su actividad delictiva se expande por toda la región.
Los últimos en caer son dos jóvenes de Langreo -los hermanos G. J. G., de 23 años, y J. J. G., que ya han ingresado en prisión- y una mujer, S. G. P., además de O. A. F., de 19 años y vecino de Siero y T. J. H., de 38 años y de Avilés. Algunos de ellos ya fueron arrestados el pasado miércoles, mientras que otros dos han sido enviados a prisión preventiva a la espera de juicio. Durante el registro de su domicilio habitual, los agentes se han incautado del dispositivo que permitía desbloquear los vehículos, herramientas, 400 euros en billetes y diversos teléfonos.
El modus operandi de esta banda es siempre el mismo. Hasta el punto de que el vehículo que utilizaban para cometer los robos terminó por darles nombre. El grupo que comete el ataque casi siempre formado por tres personas, como en el caso de los hasta ahora detenidos.
Estas personas se trasladaban hasta una población alejada de su residencia habitual y allí buscaban un coche. No valía cualquiera. Marcas como Seat, Volkswagen o Audi son las preferidas de la banda por la facilidad para forzar la cerradura con los sistemas a su alcance. Una matriculación reciente es también garante de una huida veloz. Ya en el vehículo robado, los delincuentes se trasladaban a otra población y, tras apoderarse de un registro de alcantarilla, buscaban un establecimiento de hostelería que tuviera máquina recreativa y no dispusiera de verja exterior.
En el interior, y mientras uno de los miembros vigilaba fuera, los otros dos golpeaban la máquina hasta lograr su apertura y hacerse con los cajetines de monedas.
Todo ello sin olvidarse de la caja registradora, los botes de propinas, las pequeñas cajas de caudales y la lotería. Completado el botín, los tres huían a gran velocidad haciendo imposible su persecución. Cuidaban hasta el más mínimo detalle, equipados siempre con pasamontañas y guantes para no dejar huellas. Han llegando incluso a sustraer dos vehículos y perpetrar cuatro robos en una misma noche. En este sentido, la investigación de la Guardia Civil de la Comandancia de Gijón ha permitido imputarles la sustracción de un total de ocho turismos, la quema de uno de ellos, el robo en catorce establecimientos de hostelería y el robo en 22 trasteros de un garaje. Entre los establecimientos afectados se encuentran la cafetería de la estación de servicio Central Lechera, en Siero; el bar Tais y el restaurante La Canterona, de Oviedo; el bar Quinta Avenida, en Gijón; Casa Kilo, en Quintes y El Cruce, en Posada de Llanera.
A pesar de estas detenciones, la investigación sigue dada las numerosas ramificaciones de la banda del Seat.
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