Más de mil asturianos fallecieron a la espera de la ayuda a la dependencia

Así lo asegura José Manuel Ramírez, presidente de la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales. La entidad es la fundadora del Observatorio de la Dependencia que, cada seis meses, analiza la aplicación de la ley en España y el cumplimiento que realizan las diferentes comunidades autónomas.

Un examen que Asturias suele suspender, pero que en eta ocasión, con motivo del quince aniversario de la norma que da derechos a las personas con dependencia, tiene al Principado en los lugares más destacados del ranking nacional. Es Asturias, junto con Aragón, la comunidad que más ha recudido su lista de espera, un 33,7%. Y también es líder, junto a Valencia, la que más beneficiarios ha sumado, con un 14,24% más.

De acuerdo a los datos facilitados por la entidad, en estos momentos hay 2.030 asturianos en lista de espera para recibir su ayuda a la dependencia. Es la cifra más baja desde que Asturias, de forma pionera, comenzó la aplicación de la ley, en abril de 2007. En toda España, el atasco afecta a 205.965 personas. Están esas personas en lo que la asociación llama 'limbo' de la dependencia. Un limbo que es protagonista en Cataluña, con un 31,8% de personas a la espera; La Rioja (31,2%) y Canarias (27,5%). La tasa asturiana no llega al 7%.

En cuanto a la cifra de beneficiarios, los números que maneja el Observatorio de la Dependencia, que parten de los datos del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), en Asturias son ya 27.645, aunque tienen derecho a ella 29.675. También la cifra más alta desde hace quince años. Ha sido Asturias, dice el Observatorio, la comunidad que, junto a Valencia, más números de beneficiarios sumó en un ejercicio marcado por la pandemia.

El tirón asturiano llega marcado por el plan de choque puesto en marcha por la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar. Su titular, Melania Álvarez, se comprometió a bajar el 'limbo', disparado hasta superar los 6.000 expedientes atascados, y a devolver a la ley los tiempos que ella misma fija: que no pasen más de seis meses entre que se solicita la valoración de la dependencia hasta que se obtiene la ayuda a la que tenga derecho.

Sin embargo, el ritmo asturiano no ha sido clonado en el resto del país. Lamenta Ramírez que «el Ministerio de Derechos Sociales y las comunidades no conseguirán el objetivo del plan de choque de reducir en 60.000 la lista de espera, que solo baja un 11,3% en lo que va de año». Eso sí, reconoce que «aumentan las personas beneficiarias en 87.701».

Un aumento que, no obstante, no convence a los expertos. «Los datos parecen indicar que el Servicio de Atención y Ayuda a la Dependencia (SAAD) se reactiva, pero ha sido en gran medida a base de servicios de bajo coste, dirigidos a las personas dependientes con grado I. Las prestaciones y servicios son cada vez de menor intensidad y, a todas luces, insuficientes para las necesidades de las personas en situación de dependencia».

El presidente de la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales recuerda que «ya se han recuperado los recortes de 2012 y se han incrementado los presupuestos. Hay que recortar procedimientos para evitar el sufrimiento y desatención de las personas en situación de dependencia».

Tal y como adelantó EL COMERCIO, casi 11.000 asturianos con dependencia han optado porque sea un familiar el que les cuide en su casa, la ayuda más económica de las que recoge la Ley de la Dependencia. El 61% de los beneficiarios asturianos de la ley opta por esa figura o por ayuda a domicilio.

El Principado se ha comprometido a impulsar en 2022 los mejores recursos de la ley, con la creación de las oficinas de vida independiente y la subida hasta más de 800 euros al mes de la ayuda para contratar a un asistente personal profesional.