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Más de 500 millones y más de 15.000 empleos. Y no ha hecho más que empezar. Los cuidados geriátricos, los que procura el sector sociosanitario en Asturias aportan a la economía asturiana 508 millones. y daban trabajo a más de 15.000 personas. Eso ... en 2021, año de pandemia y donde se comenzaron a poner los mimbres del nuevo modelo de cuidados de larga duración. En 2024, ambas cifras se habrán multiplicado. Y mucho más lo harán en 2033, año en el que se espera que el censo asturiano esté protagonizado por el 33,6% de personas mayores de 65 años y el 10,9% de más de 80. Y son 58.200 los hogares en los que vive una persona mayor sin más compañía.
Esas son algunas de las conclusiones del Centro de Competencia para la Economía del Cuidado de Larga Duración y el Envejecimiento Activo (Cecoec), puesto en marcha en diciembre de 2022 por el Principado junto con las cámaras de Comercio de Gijón, Oviedo y Avilés y financiado con dos millones de fondos europeos Next Generation.
Para la presentación de los resultados de este laboratorio, que ha dado formación a más de 900 personas, ha recibido a 800 personas en congresos y atendido a más de 2.500 personas, la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Marta del Arco, escogió la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma), la gran cita política, económica y social del verano asturiano que se celebra hasta el domingo en el recinto ferial Luis Adaro, de Gijón.
Estuvo acompañada Del Arco del director general de Innovación y Cambio Social, José Antonio Garmón, así como por los representantes de las cámaras de Gijón, Antonio Corripio; Avilés, Mónica Blanco; y de Oviedo, José Ángel García. Del órgano cameral ovetense vino también la directora del Área de Desarrollo Cooperativo, Carmen Robles. Ella y Garmón fueron los encargados de dar los principales datos del informe de resultados del laboratorio Cecoec.
Garmón destacó la importancia de un sector «que sigue siendo un gran desconocido», de ahí la necesidad de hacer la radiografía del mismo a través del laboratorio. Aplaudió la llegada de fondos europeos y dejó clara su utilidad, «cuando alguno pregunte que para qué son los fondos europeos, que recuerden que dos millones permitieron crear este laboratorio».
Uno que, como destacó Carmen Robles, «ha permitido evolucionar hacia la unión de la tecnología y los cuidados», una unión necesaria que ha servido para dejar claro que «la tecnología no podrá nunca sustituir el trato humano, pero sí podrá dar más calidad en la atención a los usuarios y de trabajo a los profesionales». Entre las novedades que ha permitido conocer el laboratorio Cecoec, el impulso de los servicios de ayuda a domicilio, que cada vez suman usuarios más jóvenes , debido a enfermedades neurológicas, con un horario que va desde una hora de atención a la contratación de un profesional 24 horas, así como también ayudas tecnológicas. Desde el bastón que detecta y avisa si su usuario se ha caído, hasta el control de accesos en las diferentes áreas de una residencia.
Para Marta del Arco, Cecoec «es una herramienta indispensable para que desde la colaboración entre el sector público y la iniciativa privada podamos hacer frente a los desafíos que implican los cuidados de larga duración y aprovechar también las oportunidades que brindan».
Recordó que el nuevo modelo de cuidados de larga duración «está centrado en la persona. Deben ser sus deseos los que se atiendan». Para lograrlo, para «conseguir ese cambio de modelo», es necesario «que haya entidades profesionales que ofrezcan servicios de calidad y de calidez, que abracen la innovación y las posibilidades que se abren con la digitalización», explicó.
En la presentación de los resultados del informe Cecoec se encontró la consejera con algunos de los propietarios de centros sociosoanitarios agrupados en la Mesa Sociosanitaria de la Federación Asturiana de Empresarios (Fade) que el martes solicitaron nuevas ayudas para poder adaptar sus centros y sus plantillas a ese nuevo modelo de cuidados de larga duración. Un modelo que pasa por crear en las residencias pequeñas unidades de convivencia, de no más de 15 usuarios, multiplicar las habitaciones individuales, abrir los centros de día a los barrios y, en todos los casos, aumentar plantilla.
Según explicó «estamos valorando sacar una nueva convocatoria, ya sea con fondos europeos o con fondos estructurales, puesto que la colaboración pública privada es fundamental para que la sociedad asturiana tenga a su disposición recursos sociales de calidad que satisfagan sus necesidades».
Recordó que «el año pasado pusimos en marcha líneas de ayudas para empresas, entidades sociales sin ánimo de lucro y entidades locales, encaminadas a impulsar el nuevo plan de cuidados de larga duración en nuestra comunidad autónoma, así como la implantación de la Estrategia CuidAs, propia de esta región». Las ayuda salieron a licitación en julio del año pasado y había dos vías: una para empresas y otra para entidades sin ánimo de lucro«.
Según sus datos, «hemos atendido 62 proyectos, de los cuales 52 son de empresas, destinando en total 7.600.000 euros para resolver está convocatoria de los cuales 6.700.000 euros se destinaron a los proyectos de empresas privadas. Que tienen hasta junio de 2026 para realizar las obras».
Tiene claro Marta del Arco que «Asturias necesitará incrementar su capacidad de prestar servicios ligados a la dependencia y el interés general y social está suficientemente acreditado para promocionar las inversiones en este sentido».
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