«La muerte de mi padre ha servido al menos para algo»

Virgilio García perdía la vida junto con su compañero, César Fernández, mientras despejaban la calzada del puerto el 1 de enero. La carretera estaba cortada al tráfico pero fueron a liberar a varios vehículos que quedaron atrapados por la nieve. El cuerpo del segundo fue encontrado por la noche de esa misma jornada por los miembros del operativo de búsqueda.

«Vemos que lo ocurrido sirve para algo», añadía el hijo de Virgilio. Por lo pronto, el Principado ha adquirido 80 sistemas de localización personal en caso de quedar sepultados por aludes, los denominados Arvas. «Pero creo que es fundamental que los trabajadores reciban formación para su uso», añadía. El problema, explicaba también el representante del sindicato CSI en el servicio regional de Carreteras, Marco García, es que no solo no se ha dado ese aprendizaje para su utilización, «es que todavía, a día de hoy, no se han repartido entre los operarios».

Trabajadores, usuarios y el sector turístico de Aller -vinculado a la estación invernal de Fuentes de Invierno- consideran un avance la dotación de nuevos medios técnicos, la implementación de un sistema de voladuras controladas para provocar aludes y evitar riesgos, y los planes para construir nuevas viseras que protejan la calzada. Así lo estima, por ejemplo Armando Valdés, de la asociación empresarial Aller Experiencias: «Me parece que es acertado el camino que se está adoptando. Ya se están tomando en serio este problema del que llevamos años alertando».

Un mismo parecer es el expresado por los usuarios agrupados en la plataforma SOS San Isidro. No obstante, su portavoz, Biby Miranda, coincide con el sindicato CSI en señalar que las voladuras controladas se van a encontrar con un problema: «Con el mal tiempo el helicóptero no va a poder sobrevolar la zona, como ya ha sucedido».