20 millones al año, el coste de la factura eléctrica para las instalaciones de Hunosa

Pero también hay instalaciones que siguen en activo en el listado para esta licitación, como son el pozo San Nicolás en Mieres -la única explotación de carbón que sigue activa en Hunosa, el lavadero del Batán o la propia central térmica de La Pereda, que también precisa de suministro.

Según reza en los pliegos de la licitación lanzada por la hullera pública, la duración del contrato es de un año a contar desde la fecha de inicio del suministro, con otro de prórroga adicional de mutuo acuerdo entre ambas partes. Por lo tanto, el contrato puede llegar hasta los 40 millones de euros en dos ejercicios.

La fecha estimada de inicio del suministro será a partir del día 1 de marzo de 2022, y su finalización para todos los puntos será para el mencionado periodo del año. Si no existe denuncia del contrato por alguna de las partes con tres meses de antelación a la fecha de su finalización, se considerará renovado por un periodo de un año adicional, señala el citado texto.

Hunosa tiene que recurrir a la contratación del suministro a pesar de contar con una central térmica propia, la de La Pereda. Muchos de los gastos de la hullera son por los denominados costes perpetuos por haber mantenido una actividad extractiva y la obligatoriedad de su mantenimiento. El coste estimado de este contrato de suministro -para dos años- es, por tanto, similar a la inversión anunciaba para la transformación de la central térmica mierense de carbón a biomasa, unos cuarenta millones de euros.

Los Presupuestos Generales del Estado completan la inversión prevista para la transformación de la térmica de La Pereda de Hunosa, que pasará de utilizar el carbón como combustible a biomasa y combustible sólido recuperado (CSR).

Sobre el papel, para las cuentas de 2022 hay 24,7 millones de euros para este proyecto, que se suman a los 16,4 millones consignados en 2021.