El juez condena por homicidio imprudente al acusado del atropello en Fuentes de Invierno

El juez señala que el condenado conocía la situación real existente en la vía por la que circulaba, «sabedor de que transitaba por sentido descendente, por una calza mojada y con nieve, con sus neumáticos gastados (sin duda alguna cuando paso la ITV, fue advertido de ello), y porque tras el accidente la Guardia Civil comprobó que se hallaban al límite». De este modo, se rechaza la versión de N. Y. F., quien en la vista del pasado día 2, llegó a decir que no había apenas nieve.

Tampoco da crédito a la versión del ya condenado, quien alegó que circulaba a baja velocidad y que fue un turismo, que ocupaba parte de la calzada por la que circulaba, el causante de que perdiera el control de la furgoneta. De este modo, señala en el fallo que la causa del mortal atropello fue «la notoria, evidente, palmaria falta de precaución, cuidado, atención, con que N. Y. F. llevó a cabo la conducción del vehículo (como se detalla en el relato de hechos probados), ya que es obligación del conductor evitar riesgos con su conducción, debe estar en todo momento en condiciones de controlar su vehículo, de adoptar la precaución necesaria para la seguridad en la conducción, debe moderar la velocidad teniendo en cuenta el estado de la vía, atendiendo a las condiciones climatológicas de manera que siempre pueda detenerlo dentro de campo de visión y ante cualquier obstáculo que pueda presentarse».

El juez determina que cuando la calzada esta con nieve «es necesario el uso de cadenas y aquí -el acusado- omitió todas estas precauciones mínimas necesarias en la conducción de vehículo, dando lugar al aciago siniestro, al fallecimiento de Misael García».

El letrado de la acusación particular, José César Álvarez-Linera, señala que el fallo hace también referencia a la falta de arrepentimiento del acusado tanto en la instrucción como en el juicio. No obstante, al día siguiente de la vista, el procesado llamó por teléfono a la viuda, y ahí sí que le pidió perdón, indica el letrado. «A mi juicio, cuestiones jurídicas al margen, era lo mínimo que podría haber hecho y, aunque de forma tardía, creo que a ambos les ha servido al menos desde el punto de vista emocional», afirmo el abogado.

El juez asume la petición de la Fiscalía del Principado y rechaza la de la defensa, que solicitaba la libre absolución.