Hunosa favoreció la salida de 257 trabajadores mediante jubilaciones anticipadas en 2019

Según el informe de la auditoría de la Sepi a la que fueron sometidas las cuentas de 2018, la sociedad estatal asume el compromiso de sufragar la totalidad de los costes que se deriven para Hunosa como consecuencia de los planes de empresa y, en consecuencia, la contabilidad incluye una provisión por el importe preciso para hacer frente a los costes.

«En estas circunstancias, las posibilidades de la compañía para continuar con normalidad sus operaciones y hacer frente a todos sus costes de explotación y de abandono y mantenimiento de activos abandonados, y a los compromisos adquiridos con el personal, así como la realización de sus activos y la liquidación de sus pasivos por los importes y que figuran en el balance a 31 de diciembre de 2018, están necesariamente condicionadas a que continúe recibiendo ayudas en cuantía suficiente de su accionista único o de la Administración», se indica en el documento.

El plan de empresa -que abarca hasta 2027- ofrece un marco estable, con un primer periodo de transición de la actividad de la compañía (2019-2021) y un segundo de consolidación (2022-2027). Recoge un plan de prejubilaciones obligatorias hasta 2023, así como bajas voluntarias indemnizadas. «Sin embargo, en los estados financieros de la compañía a 31 de diciembre de 2018 no se incluye ninguna estimación del impacto económico del nuevo plan de empresa», se recoge en el documento.