Historia con futuro del Salvamento Minero

Las dos primeras partes -que se encuentran en la sala de aseos- muestran en panales informativos el origen y desarrollo del cuerpo de rescate, sus técnicas y todas sus actuaciones, desde la primera el 26 de agosto de 1912 en el Pozo María Luisa de Ciaño, en el que no hubo víctimas mortales, hasta la última de julio de 2019, en la central térmica de La Pereda de Mieres, donde falleció un operario en la cámara interior de la chimenea. En los paneles también se incluye la operación de enero de 2019 en Totalán (Málaga), el angustioso rescate del niño Julen.

La brigada celebra su historia con esta muestra (de carácter itinerante y abierta hasta el 15 de marzo), pero al mismo tiempo sigue mirando al futuro. Así lo destacaba ayer la responsable de Sadim, Dulce Vega, en el acto de presentación. «El compromiso de Hunosa es firme para que continúe la labor de este cuerpo de élite. Por su especialización y porque son capaces de adentrase en espacios muy reducidos».

Precisamente, sobre ese futuro habló el director de la brigada, Javier Cabal, quien indicó que ya se ha completado el proceso de selección de los cinco nuevos componentes que se incorporarán a la agrupación (cuatro brigadistas y un chófer). Se cubren, así, las plazas que quedaron vacantes por el mismo número de prejubilaciones. «Han superado un proceso de selección en el que se presentaron un total de nueve personas. El lunes ya se incorporarán a sus nuevos puestos en la sede de la entidad», en el Pozo Fondón, en Sama de Langreo. De este modo, mantiene sus veinte integrantes.

La tercera parte de la exposición -que se ha instalado en la lampistería- recoge una amplia colección del material que se usa en los rescates así como el vestuario.

Esta muestra se ha podido visitar en la Feria de Turismo Minero del Pozo Sotón (en noviembre de 2019) y en el Museo Mina de Arnao (hasta el pasado lunes). «La exposición nace al calor del reconocimiento mediático que experimenta la brigada por su actuación en Totalán, pero lo que se pretende es dar luz y dar a conocer un oficio centenario y muy arraigado en nuestras cuencas asturianas», afirmaba la comisaria de la exposición, Lidia García, también de Sadim.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Langreo avanzó ayer que han comenzado las obras de limpieza en la cubierta de la sala de máquinas del pozo. Esos trabajos son el primer paso de las actuaciones previstas para eliminar diversas goteras y humedades que afectan a esa parte de las instalaciones. El resto de las mejoras pendientes se acometerán en los próximos meses.

«Hemos recurrido a una plataforma elevadora para poder acceder a la zona afectada en el tejado. Es el primer paso de las múltiples y muy necesarias actuaciones que hay que acometer en equipamientos municipales y, en particular en el Ecomuseo. Elegimos, además, unas fechas en las que está cerrado para no interferir en su actividad», señaló el concejal de Turismo, Javier Álvarez.