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A. FUENTE
MIERES.
Viernes, 9 de marzo 2018, 00:19
La noticia caía pesada en el mediodía de ayer. Fallecía el exalcalde de Mieres y exdirector general de Deporte, Misael Fernández Porrón. Este maestro de profesión, de 69 años, no pudo vencer la batalla contra la enfermedad degenerativa que padecía desde hace más de un año, una Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). Hace una semana fue ingresado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) donde murió. Las condolencias y las muestras de cariño hacia el socialista comenzaron a sucederse de manera instantánea. Uno de los primeros en mostrar sus condolencias fue el regidor, Aníbal Vázquez. Poco después de las dos de la tarde firmaba un decreto para declarar tres días de luto oficial. Las banderas de la Casa Consistorial ondeaban a media hasta cuando el cuerpo fue trasladado al tanatorio de Murias donde permanecerá durante toda la jornada de hoy hasta las nueve de la noche. Después, será incinerado en la intimidad.
Durante toda la tarde hubo un constante goteo de vecinos, allegados, amigos y compañeros políticos de quien fuera alcalde de Mieres entre 1995 y 2003. Entre ellos se encontraba el presidente del Principado, Javier Fernández, quien estaba visiblemente emocionado. «Es un día muy triste para todos. Era una persona muy querida. Fue un gran alcalde y un magnífico director (general de Deporte, de 2007 a 2011). Era serio y honesto. Todos los que estamos aquí éramos amigos suyos. Estamos muy afectados porque realmente era un tipo estupendo».
Una de las primeras en llegar a la capilla ardiente fue la consejera de Servicios y Derechos Sociales. Pilar Varela señalaba que coincidió con Porrón muchas veces en su faceta de responsable del área regional cuando ella era alcaldesa de Avilés. «Puedo decir que era una persona entregada».
Fernández Porrón nació un 12 de marzo de 1949. Diplomado en Magisterio por la Universidad de Oviedo en el año 1968, ejerció como maestro en diversos pueblos de la geografía asturiana, como Zureda (en Lena), Sotiello (Aller), Ujo, Rioturbio y en el Santiago Apóstol de Mieres, en el que dio clase hasta 1995. «La enseñanza era su pasión», destacaba la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Gloria Muñoz. Fue también director del Centro de Profesores y Recursos del Caudal desde 1994 hasta 1995. En 1983 es elegido presidente de la Junta de Vecinos de San Pedro, manteniéndose en el cargo hasta 1987, año en el que es elegido concejal por el PSOE. Se ocupó de la Concejalía de Cultura, Deportes y Festejos hasta el año 1991, siendo alcalde Eugenio Carvajal.
En 1995, el PSOE lo presenta a las elecciones locales como cabeza de lista. Obtiene la Alcaldía gracias a los nueve concejales que las urnas le conceden y ser el candidato más votado pese al empate con IU. Cuatro años después su candidatura obtiene once ediles y es reelegido nuevamente alcalde. De esta etapa se acuerda bien Balbino Dosantos, quien fuera secretario general del PSOE mierense. «Lo conocía muy bien, porque éramos vecinos de siempre; tras su etapa de concejal, lo propuso para ser candidato a la Alcaldía, que logró en los comicios municipales por tan solo 800 votos de diferencia con IU», apuntaba. «Estaba seguro de él, había demostrado ser una persona con una gran capacidad de trabajo y de gestión; era íntegro y honesto. Lo demuestra que en un momento dado decidió dejar la vida municipal porque decía que ya había cumplido un ciclo».
De su legado político hablaba quien fue presidente del Principado y actual senador socialista. Vicente Álvarez Areces, a la puerta del tanatorio, afirmó que ha sido una persona «que dejó huella en Mieres y en Asturias». Destacó que en su época de alcalde «pudimos compartir muchos proyectos. Con él se inició el campus universitario de Barredo y se comenzó con la autovía minera. También hablamos ya del nuevo hospital Álvarez-Buylla».
Tras dejar su cargo de alcalde en el año 2003, volvió a la enseñanza en el colegio público Santiago Apóstol. No obstante, siguió estando muy vinculado al PSOE, hasta tal punto que en 2007, con el inicio del segundo mandato de Álvarez Areces es nombrado director General de Deportes. Ocupó ese cargo hasta 2011, en el que se apartó de la política activa.
De su etapa como docente hablaba una profesora del centro mierense donde dejó de dar clases. «Fui compañera de él durante tres cursos; y puedo decir que era una persona entregada a la enseñanza», decía Mar Vega Tejón, única profesora del centro que coincidió con Porrón.
«Entonces tenía una afición que es poco conocida; y es que participaba todos los sábados en un partido entre profesores y mineros, cuyos equipos se llamaban La tiza y El Carbón; lo sé porque mi marido era su contrincante».
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