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ALEJANDRO FUENTE
RIOSA.
Viernes, 19 de junio 2020, 00:10
La empresa Maderas Riosa, propiedad de Isidro García Quintana, está ubicaba en la calle La Mina de La Ará. Se trata de un pequeño negocio familiar que tiene cuatro empleados y que está especializado en el sector forestal en sus muchas vertientes. Esta sociedad es ... la que ha propuesto levantar una planta para producir biomasa en los terrenos que actualmente están sin uso en el Pozo Monsacro.
El proyecto, que todavía en estado muy incipiente, se lleva negociando con la propietaria de la superficie, Hunosa, desde hace un año, según explicó ayer su responsable. ¿Cuál es su objetivo? «Queremos ampliar y ser parte suministradora de combustible para la futura central de La Pereda», apuntaba García Quintana.
Precisamente el presidente de Hunosa, Gregorio Rabanal, explicaba el miércoles a EL COMERCIO que sigue en marcha la fase de redacción del proyecto para transformar la central térmica de La Pereda, en el concejo de Mieres, en una central para la quema de biomasa. Se lleva ya tiempo con esta labor; pero indicaba el responsable de la hullera pública que se trata de un trámite bastante complejo, y que tendrá varias partes. Avanzó que se está ultimando la definición económica; ya hay una primera estimación que cifra la inversión necesaria para la transición en unos 23 millones de euros.
Maderas Riosa es una empresa familiar. «La actividad la inició mi padre hace casi medio siglo y desde hace 25 que la continúo yo». En detalle, la sociedad se dedica a la explotación forestal y posterior comercialización de maderas «obtenidas de forma responsable y sostenible, respetando el medio ambiente». García Quintana señalaba que todavía no hay una cantidad fija de inversión ni la cantidad exacta de nuevos puestos de trabajo que requeriría la nueva planta. «El plan todavía se encuentra en estado embrionario», comentaba el empresario.
La iniciativa cuenta con un impedimento importante, que viene de las condiciones marcadas por la Confederación Hidrográfica del Cantábrica (CHC). «Se nos pide canalizar parte del caudal del río Riosa que discurre junto a los terrenos; a ver cómo se puede solucionar», apuntaba.
No obstante, este riosano prosigue con el proyecto a pesar de los muchos terrenos industriales vacíos que hay en toda la región y en las propias comarcas mineras. «Nosotros somos una empresa de Riosa y es algo importante poder expandirnos en el Monsacro. Además, se encuentra el motivo de la cercanía con nuestras actuales instalaciones para centralizar toda la actividad y aprovechar la masa forestal de este concejo», apostillaba.
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