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MARTA VARELA
Jueves, 25 de agosto 2016, 00:17
«Quiero poner en valor el recuerdo de mi padre, ninguneado los cuarenta años posteriores a la guerra civil». Emocionado a sus 82 años, el hijo del ginecólogo mierense Vital Aza Díaz recordaba ayer a su padre. Vital Aza Jiménez explicaba que tiene la intención, en una decisión en consenso con el resto de la familia, de donar la gran mayoría de los recuerdos, libros y documentos que conservan de su padre; «que lleguen a Mieres, tengo poco pero todo está a disposición de la ciudad que nos da tanto cariño», remarcó.
Y los primeros tesoros ya han llegado a Mieres. Ayer Vital Aza Jiménez entregaba a las autoridades mierenses «un pequeño romance escrito en México en 1956 por Alfonso Camín a mi padre». Un documento que acogerá la biblioteca Vital Aza. Después llegarán otras piezas, como el nombramiento de socio de Honor del Ateneo de Turón, archivos médicos y, destacó, un libro de 42 páginas de 1933 con la portada repujada en plata que le regaló a su padre «el pueblo de Mieres y que dice: 'homenaje sincero y cariñoso que el pueblo de Mieres rinde a su hijo el doctor Vital Aza Díaz, como testimonio de gratitud por su intervención desinteresada y acendrado amor a los pobres'»; y es que este ginecólogo ejercía gratuitamente en Mieres. La buena sintonía del equipo de gobierno y Carmela González, coordinadora de la red de bibliotecas del concejo, con la familia ha favorecido este acuerdo.
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