Multitudinaria fiesta de San Martín en Moreda

La fiesta dio comienzo bien temprano. Se sabía que la jornada iba a ser larga y hacía falta coger fuerzas. El combustible era la sidra, a raudales, y las empanadas; daba igual que fueran de bonito que de carne. En la larga fila, esperando a que comenzara el desfile por las calles de Moreda, estaban los integrantes de 'les xandes' -una suerte de carrozas-, bajo el intenso sol, cargando las pilas con los elementos mencionados. La localidad allerana era un hervidero, en el que unas 10.000 personas quisieron acompañar a los Humanitarios en la fiesta de San Martín.

El epicentro era el campo de la iglesia. Y poco después de la misa en honor del patrón, a eso de las 12.20 horas, daba comienzo la 'puya'l ramu' desde la puerta del templo. Las primeras subastas fueron tímidas; llegaban a los 50 y hasta los 60 euros por cada uno de los hermosos panes. Pero la sorpresa saltó con el último de ellos. El pique era enorme y al final se batió el récord: el restaurante Las Canteronas de Oviedo pagó 500 euros. «Creo que nunca se había llegado a este precio», se escuchaba entre los asistentes, que celebraban la cifra alcanzada.

Mientras transcurría la 'puya' los miembros de 'les xandes' seguían a lo suyo, cogiendo fuerzas. «Se barrunta una muy gorda en San Martín», decía uno de los miembros de estas peñas y alcalde del concejo, David Moreno.

Disfrutando de la fiesta, por primera vez, como confesó en el pregón del martes por la noche, también estaba la directora de la Fundación Princesa de Asturias, Teresa Sanjurjo. Y entre los políticos que se dejaron ver, el portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos en la Junta General, el allerano Nicanor García.

A la una de la tarde, tras la 'plonía' de voladores dio comienzo en desfile de la cuarentena de grupos de baile, bandas de gaitas y carrozas por la localidad, cuyos componentes surtieron de sidra el recorrido. La fiesta fue larga.