Vuelta al cole 2020 | Cosas que debes saber sobre la vuelta a las aulas en Asturias

Si en un año normal la vuelta al cole supone un periodo de estrés para las familias, en este curso escolar 2020-2021, marcado por la pandemia de coronavirus, las dudas y la preocupación aumentan exponencialmente. El Principado de Asturias ha anunciado un regreso a las aulas escalonado, que será unos días más tarde en comparación a otros años para poder realizar realizar las pruebas de COVID-19 a todos los docentes. Pero muchos padres y madres se preguntarán cuándo deben llevar a sus hijos a clase, qué medidas preventivas van a adoptarse o qué va a pasar si algún alumno da positivo. Esto es lo que tienes que saber sobre la vuelta al cole en Asturias.

La Consejería de Educación del Principado de Asturias ha anunciado una vuelta al cole escalonada, que se retrasa unos días para realizar las pruebas PCR al profesorado. Estas son las fechas:

-Infantil y Primaria: 22 de septiembre

-ESO: 28 de septiembre

-Bachillerato: 29 de septiembre

-Formación Profesional: 30 de septiembre

Las instrucciones para este curso establecen que el acceso del alumnado a los centros educativos se realice de forma escalonada para evitar aglomeraciones. Por ello, los centros solicitan la colaboración y responsabilidad de las familias para garantizar que se guardan las medidas se seguridad y que las entradas y salidas se puedan hacer de forma escalonada.

La ministra de Educación, Isbel Celaá, confirmó que los centros se mantendrán abiertos durante todo el curso escolar para apoyar al alumnado más vulnerable y contarán con servicio de comedor siempre que la situación epidemiológica lo permita.

La idea es mantener los colegios e institutos abiertos incluso si se detectan casos positivos dentro de las aulas. Solo se cerrarán en casos excepcionales, «cuando la situación sea generalizada y esté descontrolada», como ha confirmado el ministro de Sanidad, Salvador Illa.

Se declara un brote cuando se detectan tres o más positivos con relación entre sí.

El Ministerio de Sanidad ha establecido cuatro medidas en caso de detectar positivos:

1. Si hay un positivo en un grupo de convivencia estable —aulas en las que los menores no se relacionan con otros grupos—, se pondrá a toda la clase en cuarentena durante 14 días. No obstante, si el caso se detecta en una clase 'normal', solo sus contactos estrechos se irán a casa.

2. Si hubiera casos positivos en varias aulas sin vínculo epidemiológico, se seguiría el mismo procedimiento (en función de si son grupos estables o no)

3. Si existe un vínculo epidemiológico constatado «habría que estudiar caso a caso. Aquí no hay blanco o negro», explica el ministro de Sanidad. si se demuestra la existencia de un vínculo epidemiológico y no se han podido mantener las medidas de prevención e higiene, se valorará la extensión de la cuarentena y suspensión de la actividad docente de otros grupos hasta transcurridos 14 días desde el inicio de la cuarentena. La actuación puede conllevar cierre de líneas completas, ciclos o etapa educativa.

4. Si aparece una transmisión no controlada, el servicio de salud pública de Asturias podrá decidir el cierre temporal del centro (no será necesario contar con el visto bueno de Sanidad ni celebrar un Consejo Interterritorial como proponía primero el Gobierno). El cierre inicialmente durante 14 días, siempre que la reapertura del centro educativo se realice cuando la situación esté controlada y no suponga un riesgo para la comunidad educativa. Aunque Sanidad y Educación insisten en que «el cierre de los centros educativos como medida para controlar la transmisión ha demostrado ser poco efectivo y tener un impacto negativo a nivel de desarrollo y educación de la población en etapa de aprendizaje».

En caso de detectar una persona con síntomas dentro del centro educativo, se procederá a colocarle una mascarilla quirúrgica y se acompañará al sospechoso a un espacio separado —que preferiblemente una sala para uso individual, elegida previamente, con una ventilación adecuada y con una papelera de pedal con bolsa—. Eso sí, el acompañante debe llevar el equipo de protección individual (EPI) adecuado.

Después se comunicará el caso a la persona responsable del manejo de la COVID-19 en el centro.

Si el sospechoso es un alumno menor de edad, se contactará con la familia o tutores legales para que acudan al centro para su recogida y estos serán los encargados de contactar lo antes posible con su centro de salud de atención primaria de referencia o llamar al teléfono de referencia.

En caso de que la persona afectada sea trabajadora del centro, se pondrá en contacto con su Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, el centro de salud o con el teléfono de referencia de la comunidad autónoma, y se seguirán sus instrucciones. En caso de presentar síntomas de gravedad o dificultad respiratoria se llamará al 112 o al 061.

En cualquier caso, Sanidad no recomienda ninguna acción hasta la obtención del resultado diagnóstico, así como mantener la actividad docente de forma normal.

A la hora de definir quiénes son los contactos estrechos se tendrá en cuenta y se valorará si se han seguido de forma efectiva las medidas de prevención e higiene adoptadas en el centro educativo. Además, se se considerarán contactos estrechos a todas las personas pertenecientes al grupo de la persona afectada. Si no pertenece a un grupo de convivencia estable, se realizará la identificación de los contactos estrechos en el centro educativo.

Todos los centros educativos deben designar a un responsable COVID-19, que deberá estar familiarizado con todos los documentos del coronavirus. Entre las funciones de esta figura se encuentra la comunicación y coordinación con los servicios sanitarios y los servicios de salud pública de su comunidad autónoma.

Sanidad también plantea que exista un canal de comunicación entre el centro educativo, el centro de salud de referencia y el servicio de prevención del personal docente. Además, se informará de las actuaciones a la comunidad educativa.

El uso de la mascarilla será obligatorio para todos los alumnos de más de seis años, aunque exista distancia de seguridad. Se recomienda el uso de mascarillas entre los 3 y 6 años cuando los menores viajen en el autobús escolar.

La recomendación para los docentes es que utilicen mascarillas quirúrgicas, aunque los centros podrán consultar con Prevención de Riesgos Laborales.

Los centros educativos deben tomar la temperatura a los estudiantes; una medida preventiva que también podrán aplicar las familias. Si se realiza en el centro será evitando aglomeraciones y asegurando el mantenimiento de la distancia mínima interpersonal.

Las familias también deben tomar la temperatura a los alumnos para detectar cualquier posible síntoma de coronavirus en el menor. En caso de presentar fiebre, los estudiantes no podrán acudir a clase. La ministra de Educación ha destacado que la responsabilidad de los padres en cuanto a llevar a sus hijos sin fiebre se podrá fijar a través de una «declaración responsable» o bien de una «información fehaciente», que se hará llegar a los centros.

Todos los alumnos deberán lavarse las manos al menos cinco veces al día. La ministra de Educación ha resaltado la importancia de la ventilación y limpieza y desinfección de las instalaciones, manteniendo con distancia los servicios de comedor y transporte escolar.

En este sentido, el ministerio recomienda ventilar «entre 10 y 15 minutos al inicio, al final de la jornada, durante las clases, manteniendo las ventanas abiertas todo el tiempo que sea posible».

Los baños tendrán que limpiarse un mínimo de tres veces al día, momentos en los que los alumnos y el personal de limpieza no podrán cruzarse.

Los vestuarios deberán desinfectarse, como mínimo, dos veces al día, según el protocolo de Asturias.

Los comedores escolares abrirán con dos pautas claras: distancia interpersonal de 1,5 metros (menos para los alumnos que pertenezcan a un mismo grupo de convivencia estable) y cada estudiante tendrá un sitio fijo.

Sin embargo, la distancia interpersonal obligará a reducir el aforo máximo en algunos de estos comedores, por lo que el orden de prelación para el uso del servicio hasta el aforo máximo admisible será: alumnado transportado con derecho a comedor gratuito; niños de familias económicamente desfavorecidas, alumnado de Educación Infantil y luego el resto.

Maite Fernández, directora del colegio Carmen Ruiz-Tilve, de Oviedo -con 600 alumnos, de los que 400 utilizan el servicio-, explicó a EL COMERCIO que esta es su «mayor preocupación». «Con dos turnos no puedo atender toda la demanda».

A partir de los 6 años, el uso de la mascarilla será obligatorio en el autobús. Además, es recomendable para los menores de entre 3 y 5 años.

Los alumnos también tendrán un puesto fijo para todo el año.

Durante el recreo se zonificará el espacio para limitar el contacto con otros grupos y se establecerán turnos.

En Infantil y en el primer ciclo de Primaria el alumnado se organizará en grupos de convivencia estable o aulas burbuja (idealmente, de 15 alumnos, aunque se ha establecido un máximo de 20 estudiantes) para que puedan socializar y jugar entre sí. En estos casos, no se aplicará limitación de distancia.

A partir de tercero de la ESO los alumnos asturianos asistirán a clase de forma semipresencial. Esto quiere decir que el alumnado de tercero, cuarto y los dos ciclos de bachillerato estarán unos días en el aula y otros en casa y los grupos se relevarán.

Esta medida se ha adoptado en otras comunidades como Aragón, Murcia y Madrid.

Se han organizado las aulas por optativas y se reducirán los grupos hasta un máximo de 20 alumnos por clase hasta segundo de Secundaria. Hasta ahora este límite se ceñía desde Infantil hasta cuarto de Primaria.

La reducción del número de alumnos por aula lleva aparejada la ampliación de las contrataciones. De esta forma, habrá que contratar a 860 profesores más con respecto a lo previsto inicialmente

El personal que trabaje en el centro reducirá a lo imprescindible su permanencia en el mismo y se promoverá la realización telemática de las actividades no lectivas que así lo permitan

La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha querido tranquilizar a las familias asegurando que es «seguro» llevar a los niños a clase, aunque asume que «no existe riesgo cero» de contagio «en ningún ámbito social». «La escuela en este momento, como se está preparando, es más segura que otros entornos», ha argumentado. Al mismo tiempo, Celaá ha recordado que en España la escolarización es obligatoria desde los 6 hasta los 16 años.

«Hay que ir a clase, es obligación asistir a clase, examinarse y seguir el ciclo formativo», ha insistido. «Los beneficios de la educación son muy superiores al riesgo en una aula», ha añadido.