Coronavirus Asturias | El Principado recomienda a los mayores de 65 años pasear de 9 a 12 y de 15 a 18 horas

Estas franjas horarias, similares a las de la fase 1 de la desescalada, se plantean en el marco de la recomendación general a toda la ciudadanía de confinarse en sus domicilios de forma voluntaria y tienen un objetivo bien definido: conseguir que «disminuya la transición comunitaria del virus sin que suponga un impacto negativo en el bienestar físico y mental de las personas».

Por ello, Salud defiende «que la actividad física se realice por franjas horarias y en espacios al aire libre dentro del municipio de residencia» y considera que «cada persona podría dedicar dos horas diarias a la práctica de ejercicio o a pasear, individualmente o acompañada por convivientes». No obstante, insiste: deben limitarse los desplazamientos a los mínimos indispensables y cuando se hagan, circular «forma individual o con convivientes».

Además de fijar horarios para la protección de los mayores y personas más vulnerables a la incidencia del coronavirus, el Principado propone «medidas específicas en las residencias de mayores que garanticen la actividad física y el paseo diario» estableciendo, entre otras medidas de seguridad, «zonas perimetrales seguras».

Por otra parte, el Ejecutivo regional ha acordado mantener el cierre perimetral de Asturias y de los concejos de Oviedo, Gijón y Avilés, «como mínimo», hasta el 18 de noviembre. También están en vigor el llamado toque de queda de 22 a 6 horas y el cierre de las actividades no esenciales.

Desde el Principado se insta a las empresas a que, «en la medida de sus posibilidades, den prioridad al teletrabajo» e insisten a toda la población en extremar las medidas de prevención y respetar las medidas de seguridad conocidas, como el uso de mascarillas, la higiene de manos y el distanciamiento físico. Asimismo, aconsejan evitar «los espacios cerrados con muchas personas y escasa ventilación».

Todas estas medidas, desarrolladas en el documento adjunto, persiguen limitar la movilidad y la interacción social para reducir la propagación del virus y disminuir la presión del sistema sanitariao, así como reforzar la protección de los más vulnerables y mantener la actividad educativa.