Los comerciantes de Avilés lamentan «una vuelta de tuerca más»

José Antonio Álvarez, gerente de la Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (UCAYC), lamenta «una vuelta de tuerca más en esta estrategia de prueba-error que difícilmente te permite planificar nada». Le choca, además, que el toque de queda se mantenga hasta las diez de la noche, pero se obligue a los negocios y a la hostelería a cerrar a las ocho. «¿Y por qué no a las nueve y media?», se pregunta. En su opinión, se está provocando un «daño innecesario a un sector injustamente tratado».

Insiste en que ni la hostelería ni el comercio son culpables de los contagios de coronavirus, que solo pueden atribuirse «a nuestra inconsciencia» en las reuniones sociales, bien en ámbitos públicos o privados. Critica las «medidas de hoy para mañana» y reta a adoptar otras más «valientes y drásticas» como en marzo, «con las compensaciones lógicas».

Juan Queipo, gerente del centro comercial El Atrio, se muestra mucho más resignado que el gerente de la UCAYC. «Nuestro horario de centro comercial queda recortado en un hora, que es la que la gente dispone al salir de trabajar para comprar, pero no nos queda más remedio que acatarlo», asume. Lo peor es desconocer si serán 'solo' quince días o más y una actuación que le da la sensación de ser algo improvisada: «Se está actuando cuando pasa algo, sobre la marcha».

Incapaces de adelantar qué puede pasar mañana y también de ser optimistas, se preguntan en la UCAYC si «¿quieren convertir este país en un erial?»