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Luz verde al 'tarifazo' en el Consorcio de Gestión de Residuos (Cogersa). La comisión delegada, dirección en la que están el Principado y los ayuntamientos de Gijón, Oviedo, Avilés, Gozón, Laviana y Mieres, autorizó que desde el 1 de enero la entidad cobre a los ... consistorios 96 euros por cada tonelada de basura mezclada que arrojan los ciudadanos al contenedor que no es de reciclaje. La subida es del 43% respecto al precio actual, de 67 euros, con la particularidad de que el Principado reparte ayudas a los ayuntamientos para que su esfuerzo final ronde los 24,3, el precio que había en 2021. Desde esa situación el incremento resultante es del 295%.
Los representantes de Oviedo y Gijón votaron en contra de una subida que será oficial si la ratifica la junta de accionistas de Cogersa, donde tienen asiento todos los ayuntamientos. PP y Foro se oponen, pero los ayuntamientos en los que forman parte del equipo de gobierno local no bastan para imponerse. El hecho de que el Principado tenga el 20% de los votos hace que su peso ponderado no sea suficiente para contrariar al Gobierno regional.
Nieves Roqueñí, consejera de Transición Ecológica y presidenta de Cogersa, puso el foco en una derivada que puede hacer aún más gravosos para el ciudadano los cambios por venir. Cogersa cobra a los ayuntamientos el coste de tratamiento de la basura y cada equipo de gobierno local es libre de repercutir ese precio o no. La mayoría opta por no cargar íntegramente el coste, lo que implica que los vecinos están pagando por debajo de lo que vale el tratamiento. A partir del 1 de enero de 2025 la ley obliga a los alcaldes a reflejar en las tasas de basura el coste íntegro, con lo que la subida respecto al recibo actual será todavía mayor.
«Por los estudios que conocemos a nivel nacional la tarifa que pagan los españoles es deficitaria en un 60%, es decir, están pagando un 60% de media menos de lo que es el coste real», señaló la consejera. Aludía a un trabajo de la Fundación Ent, que analizó las tasas de 131 municipios; la muestra incluye en Asturias los de Sobrescobio, Somiedo, Llanes, Mieres y Oviedo.
Su informe concluyó que la basura cuesta 3.828 millones, y vía tasas los ciudadanos pagan 2.251. Es decir, la tasa cubre el 58,8% del coste y lo que falta se pone con otras partidas; a partir de 2025 todos deben trasladar el 100% del coste a la tasa. «La mayoría de ayuntamientos no son conscientes de las obligaciones que comporta la nueva ley en materia de tasas, ni de las oportunidades que depararía darles un pronto cumplimiento», indicó Ignasi Puig, coautor del informe.
En esa línea se manifestó Roqueñí. «En Asturias hay ayuntamientos que no han hecho subida de tasas desde hace mucho y otros que hacen un uso responsable de las tasas y repercuten año a año el coste de servicio», distinguió.
Sobre la subida que aplicará ahora Cogersa al entrar en funcionamiento la planta de basura bruta, fue clara: «Evidentemente esto era conocido, llevamos muchos años de construcción de la planta y hemos tenido muchas reuniones con los ayuntamientos para advertirles de que esto iba a ocurrir». «Han tenido tiempo para ir subiendo las tarifas», recriminó.
En Asturias «hay ayuntamientos con un déficit casi histórico en lo que son las tarifas a los ciudadanos y muchos que cobran a la vez la basura con el agua y el alcantarillado, de forma que el ciudadano no sabe lo que está pagando», describió. La Ley de Residuos estatal marca un calendario para acabar con esta situación, instando a que cada ciudadano pague por completo por la basura que genera. «Entiendo que el contexto de Gijón es complicado y en Oviedo ellos asumen ese coste, pero me imagino que cuando toque repercutirlo al ciudadano deberán darles explicaciones», previno Roqueñí.
Con todo, se comprometió a poner fondos autonómicos para «ayudar a que la subida sea progresiva». Por el momento bonificará el coste de gestión de los residuos que se echan al contenedor marrón, y prepara incentivos a los ayuntamientos que más reciclan. Roqueñí recordó que los desperdicios que se arrojan en los contenedores de recogida separada no generan coste de tratamiento, por lo que animó al ciudadano: «Tienen en su mano bajar la factura reciclando».
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Sus explicaciones no convencieron a los concejales de Oviedo y Gijón, consistorios que reúnen el 48% de la población. Rodrigo Pintueles, concejal de Medio Ambiente gijonés, estima que la subida de la basura bruta generará para Emulsa un sobrecoste de 2,3 millones, mientras la de procesado de muebles añade otros 400.000 euros. «Evidentemente este incremento de casi tres millones que hemos conocido la semana pasada no estaba incluido en la Ordenanza Fiscal que hemos aprobado ni en el proyecto de presupuestos», lamentó. La aportación municipal con la que trabajaba para equilibrar la empresa «queda casi convertida en papel mojado».
El edil reclama al Principado subvenciones para paliar el incremento. Otra alternativa que puso sobre la mesa es «que Cogersa haga un reparto de dividendos entre los socios del consorcio de parte de las reservas del patrimonio neto con el que cuenta, que ascienden a 59 millones».
José Ramón Pando, edil de Oviedo, ve «brutal» la subida y dijo que, aunque Roqueñí ofrece ayudas, «el Principado aún no tiene presupuesto. No vamos a votar a favor de la subida hasta que tengamos la seguridad de que van a bonificar la tarifa».
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