OLAYA SUÁREZ
GIJÓN.
Domingo, 15 de septiembre 2019, 02:54
Aunque las drogas tradicionales como la cocaína, el hachís y las anfetaminas continúan siendo las más consumidas, y también las más decomisadas en la región, las fuerzas de seguridad alertan de la llegada a Asturias de nuevas sustancias estupefacientes con efectos incluso más ... dañinos.
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Un ejemplo es la droga conocida como Nexus (2-CB), una feniletilamina a medio camino entre el LSD y el MDMA que provoca efectos psicodélicos y alucinaciones. La reciente intervención de la Guardia Civil en el Aquasella permitió interceptar por primera vez en el Principado esta droga, conocida también como 'pantera rosa' o cocaína rosada. Fueron 109 los comprimidos aprehendidos.
La droga entra principalmente por carretera, «a través de las autovías que unen diferentes puntos del norte del país». También continúa por esta misma vía hacia «otros posibles destinos en el resto de la geografía, en función de la operativa de los distintos grupos criminales dedicados al tráfico de estupefacientes», explica un agente de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón.
Los narcotraficantes «se sirven de medios de ocultación a través de vehículos 'caleteados'», práctica consistente en «la transformación de una parte del interior del vehículo en un habitáculo que a la vista de una inspección superficial pueda pasar desapercibido y que tiene complejos mecanismos de apertura». El recurso a estas técnicas «pone de manifiesto las medidas de seguridad que toman las organizaciones», lo que supone «considerables esfuerzos de cara a llevar a cabo las investigaciones, independientemente de la notoriedad que pueda resultar de las aprehensiones».
De forma paralela al tráfico de drogas por carretera, los canales marítimos han ido en aumento en los últimos años. Un ejemplo reciente es el hallazgo este mismo verano de un fardo de 1,2 kilos de cocaína en la playa de Los Quebrantos, en Soto del Barco. «Es otra de las alternativas más comúnmente utilizadas para el tráfico de drogas. Ese hallazgo, al igual que otros que han tenido lugar previamente a lo largo de las costas de la región, favorecen información para potenciar la investigación de posibles rutas y organizaciones criminales dedicadas a la comisión de este tipo de ilícitos».
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En cuanto al perfil del consumidor de drogas, la Guardia Civil considera «difícil desde la perspectiva policial establecer un perfil específico de consumidor, ya que se constatan rangos de diferentes edades que pueden oscilar desde la juventud, alrededor de la veintena, hasta personas de mayor edad». El cuerpo policial añade que «también se pueden observar diferencias sobre las drogas consumidas, evidenciando que a nivel provincial se da la misma evolución experimentada en ámbitos más amplios como el nacional».
Surgen nuevas drogas y repuntan las antiguas que se daban por prácticamente por extinguidas, como la heroína. «En los últimos años , a nivel nacional, está habiendo un posible repunte silencioso. En la actualidad, frente al tradicional uso de jeringuillas para su consumo por vía intravenosa, se aprecia una preferencia por su inhalación y, en menor medida, esnifada», aseguran fuentes de la Comandancia de Gijón. En la región se han producido recientemente varias operaciones contra el tráfico de heroína, una de ellas hace algo más de un mes en Gijón y Avilés.
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