«Hasta que cobren todos la ayuda al alquiler, seguiremos haciendo presión»

Al otro lado hay situaciones como la de Yanina Herrera. «Soy de las pocas que conozco que lo recibí, 820 euros del primero pago. Nadie me informó de cómo hacer para el segundo, pero ya fui a registrar el resto de las facturas que necesitan para pagar», detalla.

En total tiene reconocido el derecho a percibir 1.400 euros, un auxilio clave: «Mi marido trabaja y tengo un hijo con discapacidad; el dinero lo necesitábamos entre otras cosas para ponernos al día con el casero». El propietario fue paciente, «pero también nos decía que esto se iba alargando y qué el también tenía deudas». Ahora empieza a ver la luz, pero los meses de espera le han puesto en contacto con otros aspirantes, se han creado lazos y no piensa cortarlos. «Yo voy a seguir movilizándome con ellos. Nunca estuve en ningún movimiento de protesta y aquí estamos, apoyándonos».

«Hasta que cobren todos, seguiremos haciendo presión», abunda Yolanda Gutiérrez. Hace las veces de portavoz de la plataforma de aspirantes a la subvención. Desde una red social se fueron contando las penas, comparten información, buscan soluciones. «Yo salí en la lista de los que la tenemos concedida, pero no he cobrado. No nos cuadran las cifras que dice la consejería», refiere. Para tener datos propios organizaron ayer una encuesta en la red social, abierta y sin que los participantes acreditaran su situación. Entre los primeros 260 que votaron, el 44% dicen haber empezado a cobrar y un 4% asegura que el dinero se había transferido, pero con errores.

Norma Yasychyn es uno de esos casos: «En la resolución salía que me la concedían, pero el jueves pasado recibí un mensaje diciéndome que me habían ingresado 1.200 euros en el Sabadell». En la documentación que presentó en el registro del Principado el 13 de abril de 2021, es decir, dentro del plazo, especificó que el dinero fuera a su cuenta de ING. En el formulario dos profesionales de la entidad bancaria firman y avalan que ella es la titular de esa cuenta.

Pese a haber pedido que el dinero fuera ahí, se le pagó en una cuenta del Sabadell que había usado en otras convocatorias y a la que no tiene acceso: «Me la tienen bloqueada por una deuda. En la pandemia me pasaron unos intereses abusivos y lo tengo en un contencioso. He protestado y me dicen que por qué tengo tantas cuentas. Me he quedado con una mano delante y otra detrás».