Científicos asturianos dan con los genes de un tipo de cáncer de sangre

«La última publicación fue para describir los genes implicados en la leucemia linfática crónica», presentó Antonio Fueyo, director del IUOPA. El avance ayudará a «descubrir qué causas genéticas pueden producir este tipo de leucemia», aclaró. El 10% de los cánceres tienen causas genéticas, mientras que el origen del resto está en «factores ambientales como puede ser por ejemplo la contaminación».

Cuanto más se conoce, más complejo resulta el cáncer. Su prevalencia depende del tipo de tumor, los hábitos del paciente, su sexo, el lugar donde reside o los genes, un amalgama de factores que al final también causa diferencias entre territorios. «En Asturias los tumores más abundantes son los de pulmón y colon en varón y el de mama en mujeres», ilustró Fueyo. «Hay una zona en las cuencas mineras en la que hay una gran cantidad de cáncer de colon; una de las explicaciones puede ser la contaminación que hubo hace años, que era alta, pero también hay que contar con el tipo de alimentación y un consumo de alcohol y tabaco que sobrepasaba a la media nacional», dijo.

Fueyo presentó la memoria de actividades de 2017 a Carlos Siñeriz, director de la Fundación Cajastur-Liberbank, que viene patrocinando a la entidad desde sus inicios, en 1999. «En estos dieciocho años hemos aportado más de doce millones», indicó el representante de la entidad financiera, quien comprometió alrededor de 200.000 euros más para el presente curso. De paso, recordó a las entidades sociales asturianas que la fundación tiene abierto hasta el 29 de junio el plazo para presentarse a unas ayudas que el año pasado repartieron 240.000 euros en actividades para los más desfavorecidos.

El respaldo de la Fundación Cajastur-Liberbank ayuda, pero desde el IUOPA se lanzó un llamamiento al resto de entidades para mantener una financiación que el pasado año se situó en los 5,9 millones. Desde esa atalaya dividida en dieciocho grupos de investigación, Fueyo argumenta que la batalla contra el cáncer avanza, que se avanza en la reducción de las tasas de mortalidad, aunque no de igual forma en todos los tumores, reconociendo el de páncreas como una de las asignaturas pendientes.

En general «cuanto más avanzamos, surgen otros problemas», matizó la subdirectora, Ana Baamonde, en referencia a que los pacientes cuya supervivencia se va logrando luego pueden presentar otro tipo de complicaciones.