«Cerrar a las 3 es la ruina de los pubs sin terraza. Un cierre encubierto», dice el ocio nocturno

Ocio nocturno abierto hasta las 3 de la mañana. «Es un cierre encubierto». «Palos de ciego». «Nuestros locales son seguros y los jóvenes están más protegidos en ellos que en botellones o en fiestas privadas».

La decisión del Principado de asumir el paso atrás del Ministerio de Sanidad y permitir que el ocio nocturno abra hasta las 3 de la madrugada (el resto del sector debe cerrar a la 1) no ha servido para calmar los ánimos de unos empresarios «que llevamos quince meses cerrados».

Así lo defiende Valentín García, propietario de varios locales de referencia en la noche gijonesa. «Para los pubs pequeños sin terraza es una ruina, un cierre encubierto». En su opinión, «para salir a tomar una copa sentado, sin barra y sin poder estar de pie socializando, te la tomas en tu casa con tus acompañantes que te saldrá más barato». En su opinión, «no hay explicación sanitaria que respalde ese horario, que solo fomenta botellones y fiestas privadas».

Una situación que conoce bien Ángel Lorenzo. El presidente de Otea en Gijón aplaude «que se vayan dando pasos para suavizar las medidas restrictivas», unos pasos que «vemos con ilusión», aunque defiende que «nuestros locales son seguros y los jóvenes están más protegidos en ellos que en los botellones o en las fiestas privadas».

Para Félix Marcos, de Hostelería con Conciencia, los cambios diarios son «palos de ciego que generan confusión para la clientela y caos a los empresarios».

Porque, como asegura Valentín García, «con el 50% del aforo y esas condiciones, no se ganará ni para sacar a un camarero del ERTE». Insiste él en que se trata « de un cierre encubierto», porque muchos compañeros no podrán abrir. La idea que mantiene el sector es que, al prolongarse el horario de la hostelería hasta la 1, pocos clientes van a acudir a un local de copas hasta las 3 de la mañana.

No obstante, en una nota oficial, Otea insiste en que se trata de «un paso adelante» y que espera que «debe seguir mejorando cuando la situación mejore».

Lostres empresarios coinciden, además, en reclamar «la apertura de las barras». Para Lorenzo, «hay mucha hostelería, en especial las vinaterías y las sidrerías, que dependen de ellas». Para Marcos, la apertura de las barras «viene en el decreto, pero se lo han saltado. Al principio, era el libro de cabecera, pero, pasamos a nivel 1 de alerta y, cuando llegó el momento de abrir las barras, no se hizo».

Como tampoco están llegando «las ayudas prometidas». Según Valentín García, «no se sabe nada de ellas», mientras Félix Marcos apunta a que «están llegando con cuentagotas»-