«Somos los reyes de la fantasía»

En total, 56 participantes componen Xaréu. Desde bebés a abuelos, hasta tres generaciones están dentro. «Es un actividad que puedes hacer en familia y te presta», dice Pita. Y, aunque no de la misma sangre, se han convertido en un segundo hogar en el que todo queda en casa, «nosotros mismos nos encargamos de confeccionar los trajes y producirlo todo, no hay nada externo». Por esta razón, al ser un número muy elevado, comenzaron a elaborar la idea de este año el pasado mayo. «El carnaval cae muy pronto y si no vendríamos afogaos».

Conocidos por llevar la fantasía al extremo, advierten: «Este año vamos a dar el cante». Va a ser «algo diferente», pero «manteniendo la esencia». La idea que lleva rondando meses en la cabeza del grupo «es lo contrario a lo que se imagina el público que haríamos. Siempre le damos una vuelta de tuerca a todo, somos los reyes de la fantasía y ahí nos vamos a quedar», anota Álvarez. «La gente no se espera vernos así, no lo va a identificar con Xaréu en un primer vistazo, pero van a sorprenderse para bien», añade la compañera Beatriz Méndez, una de las encargadas de confeccionar los disfraces.

Tan fantásticos en el tema de los disfraces como en el tema de las coreografías, «siempre hacemos cosas muy movidas, muy animadas y nuestros desfiles son una carrera de fondo», describe Álvarez. Este año, adelanta, «he querido añadir cambios de figuras y diferentes coreografías en un mismo punto». Algo que «lleva mucho más tiempo» pero, a la vez, «es algo mucho más atractivo visualmente». No solo en el desfile. En el escenario «hay momentos en el que hay seis coreografías diferentes simultáneas, pero diferentes entre sí».

La charanga creada en el barrio de Jove en 1995 se ha consagrado como una de las más influyentes en los últimos años. «Este es nuestro antruxu número 29, hemos evolucionado mucho. Día a día y año a año eso se va notando. Cada vez tenemos más perfección a la hora de trabajar, de hacer los ensayos y de demostrar lo que valemos», resalta Pita. Aunque ellos lo denominen «buena racha», más bien es el esfuerzo y empeño el que hace que «los últimos años hemos estado en el pódium y llevamos diez entre los cinco mejores».

Aún así saben lo que es estar abajo. «Hubo años en que ni siquiera nos nombraban como charanga. Conocemos las dos partes y es algo que intentamos transmitir a las nuevas incorporaciones. Aunque si ganamos premios mejor que mejor», lo primordial es «disfrutar del carnaval y del buen rollo que tenemos». De hecho, siguiendo la máxima de la portavoz, para todos ellos «el carnaval son once meses esperando a que llegue».