«Nuestro punto fuerte es la escena»

Para ellos, el carnaval es el momento de que el pueblo hable. Pero no solo a nivel político, también para denunciar las injusticias sociales. En general, «todos esos temas que de otra manera son más complicados de tratar», pero que en el Antroxu, sirviéndose de la comedia, se pueden tocar «de manera más suave mientras haces tus reivindicaciones en favor de la gente que lo está pasando mal».

Famosos por tener unas letras bastante cañeras, confiesan que no habrá ninguna referencia a la guerra de Ucrania. «Nosotros somos más de tirar por nuestros problemas de casa porque nuestro alcance tampoco va mucho más allá de Asturias», explica Marcos. El que escribe las letras es su padre, Miguel, que tiene una cabeza «como una biblioteca». Su filosofía a la hora de componer es la de defender lo local. «Sería muy fácil defender los temas más candentes de la actualidad, pero no vamos a lo fácil», apunta su hijo. La música que les acompañará este año será otro de los puntos clave. A sabiendas del nivel al que compite la percusión del carnaval, han trabajado mucho en ello. «Los demás compañeros tienen unas percusiones buenísimas, pero yo creo que este año sí que estamos al nivel del resto».

Son una de las agrupaciones más jóvenes de la ciudad, tanto en trayectoria como en la edad de sus miembros. La mayoría está entre los 18 y los 30 años, algo que para unas cosas juega a su favor pero que «también es malo porque la fiesta nos pierde y luego en los ensayos hay unas caras que...», cuentan entre risas. Pero superado el ensayo del pasado domingo en el Jovellanos, no tienen nada de qué preocuparse porque saben que «asusta más vacío que lleno».