Un cántabro de 56 años fallece de forma súbita en la playa franquina de Pormenande

Unos días de descanso en la costa occidental asturiana terminaron con el peor desenlace para un vecino de Suances, de 56 años, que falleció ayer súbitamente en la playa franquina de Pormenande. «Sentí alboroto cuando bajaba a hacer la ronda a la playa, y ... me encontré con el hombre dentro de la furgoneta casi sin respiración. Hace tan solo 15 minutos estaba desayunando en el bar y fue a tumbarse porque se encontraba mal», relató el único agente de policía local de El Franco que controló con mucha resolución la situación hasta la llegada de la médica. Ante la angustia de la compañera del cántabro y los presentes, el agente intentó la reanimación cardiopulmonar del hombre al percatarse de que ya no tenía pulso. Lamentablemente, la reanimación no funcionó y el hombre fue declarado muerto al mediodía, tras lo que se requirió al forense.