Debate de investidura en Asturias

Buena acogida de la izquierda a la apuesta «progresista» y críticas del centroderecha

Carcedo destacó las palabras de Barbón en referencia al Estado del Bienestar, que «siempre defendemos los socialistas; el candidato ha dejado claro que éste es un proyecto progresista». Apuntó a que este Estado del Bienestar «hay que cuidarlo todos los días, porque es el sistema que nos da protección, seguridad y que permite garantizar la igualdad de oportunidades para todos». Resaltó la defensa «clara» de los derechos y libertades, «de no dar paso atrás en la lucha efectiva en la igualdad entre hombres y mujeres, para apoyar y proteger la diversidad».

Carcedo afirmó que «nos quedamos con la disposición al acuerdo, al diálogo, a la colaboración importante entre las administración para defender y dar más fuerza a los intereses de Asturias, acuerdos necesarios con otras fuerzas políticas de esta cámara, con agentes sociales y económicos, que nos permita trabajar juntos por un proyecto común que es Asturias».

El portavoz del Grupo popular, Diego Canga, quiso destacar que Barbón «ya tiene una historia», y señaló que su actual discurso tiene varias repeticiones con el de hace cuatro años «en los que hubo una tasa de ejecución presupuestaria baja, hubo muchos incumplimientos». Dijo que hay mensajes que pueden sonar bien en apariencia, «pero no los hechos no confirman esos mensajes».

La portavoz de Vox, Carolina López, criticó duramente al PSOE por excluirlos de la ronda de diálogo con los grupos de la Junta General. «Ha excluido a 53.000 asturianos». Dijo que Barbón, en su discurso, reconoce que ha sido «el presidente incapaz, porque realmente ha hablado de los mismos problemas y de las mismas soluciones». Por eso, señala que no se pueden aplicar las mismas medidas cuando éstas ya no han funcionado. «Nos esperan cuatro años de parálisis, de destrucción de empleo, de riqueza y de población».

Se trata de una constante en el resto de formaciones de la Junta General. Incluso su posible socio de Gobierno, Izquierda Unida, criticaba la escasa autocrítica de los socialistas: «La falta impulso real», que le daría IU, apuntaba. Por si solo no va a llegar esa transformación». En este sentido, el portavoz de esta formación, Ovidio Zapico, señaló que el candidato «ha mostrado en su discurso un elenco de avances y de éxito que, en ocasiones, no son tales, que se ha refugiado en lo simbólico y que no ha entrado en cuestiones fundamentales para Asturias, como la situación de la industria y con el medio ambiente».

El portavoz de Foro, Adrián Pumares, dijo que el discurso del socialista «tuvo poca sorpresas y continuismo». Dijo que los últimos cuatro años fue una legislatura de «parálisis», con un calendario legislativo que «no se cumplió». Apunto a que se ha hablado poco de las infraestructuras pendientes y tendió la mano a los socialistas para abordar cuestiones importantes, «como la financiación autonómica que tenga en cuenta las características del Principado».

Covadonga Tomé, de Podemos, señaló que el discurso del candidato socialista «me trasladó a una Asturias diferente a la que yo viví en los últimos cuatro años». Habló del diálogo ofrecido «que tiene que ser con todos y que con nosotros ha sido poco intenso». No obstante, dijo que su posición es que haya en Asturias un gobierno progresista. «Que puede ser estable y de mayoría» señalando un posible apoyo de su formación a los 19 votos asegurados del PSOE y a los tres de IU. «He apostado desde el principio a que Barbón asuma la responsabilidad y tenga la valentía de aportar por este gobierno estable». Pero el apoyo de Podemos va a estar condicionado a lo que decida la militancia en una asamblea abierta que se cierra este martes a las 22.30 horas.