Arrancó la duodécima legislatura en el Principado y lo hizo sin sorpresas: con Juan Cofiño elegido presidente de la Junta General, con Vox fuera de la Mesa al no haber cedido el PP ninguno de los dos puestos que le correspondían y con el acuerdo ... entre el PSOE y Convocatoria por Asturias para que Delia Campomanes ocupe una de las secretarías. Fue un pleno de formación del Parlamento asturiano rutinario, sin sobresaltos ni polémicas, pero que sí ha servido para empezar a deducir lo que pueden ser los equilibrios políticos de la legislatura. Por ejemplo, la gobernabilidad. Porque el apoyo que el único diputado de Foro ha dado a Juan Cofiño para ser elegido presidente de la Junta General allana el camino para que el socialista Adrián Barbón sea investido presidente del Principado —desde ayer el Gobierno se encuentra en funciones— para los próximos cuatro años.
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D. FERNÁNDEZ
La elección de Juan Cofiño fue posible merced al acuerdo que habían alcanzado PSOE y Convocatoria Por Asturias. Este pacto aseguraba al exvicepresidente del Principado los 22 votos necesarios para, en segunda votación, ser proclamado presidente de la Cámara por mayoría simple. Sobre todo después de que en el arranque del pleno el grupo de Vox anunciara que presentaba su propio candidato, Gonzalo Centeno, por lo que la posibilidad de que la Presidencia de la Junta cayera en manos del PP (presentó a José Manuel Felgueres como candidato para presidir el Parlamento) se esfumaba. Pero no hizo falta llegar a esa segunda votación. Juan Cofiño fue elegido por mayoría absoluta gracias al apoyo de Adrián Pumares y que supuso el vigésimo tercer voto necesario para salir elegido presidente de la Cámara por la vía rápida. «Creemos que puede desempeñar un gran papel», afirmó el diputado forista. Covadonga Tomé, única representante de Podemos en la Junta esta legislatura, se abstuvo en esta votación.
Aunque una cosa es la formación de la Mesa de la Cámara y otra bien distinta la investidura de un presidente de Gobierno, lo cierto es que esa geometría parlamentaria lleva a unir una cosa con la otra. Foro quiere jugar el papel de bisagra que le permita, por un lado, tender la mano al PSOE cuando sea necesario y arrimarse al bloque de la derecha cuando la ocasión obligue a ello. Ayer Adrián Pumares dobló la bisagra hacia el lado socialista, dando su apoyo a Juan Cofiño, pero además también ha reiterado que mirará hacia el mismo lado durante la investidura de Barbón, aunque en ese caso lo hará desde la abstención. El diputado de Foro lo confirmó ayer, diciendo que no apoyará al candidato del PP, Diego Canga, ni tampoco al presidente del Principado en funciones y ganador de las elecciones, sino que se abstendrá.
De esta forma, Adrián Barbón podrá ser investido con el apoyo de los tres diputados de Convocatoria por Asturias, obteniendo así 22 votos, suficientes para ser investido por mayoría simple. PP obtendría como máximo 21, si logra el apoyo de los cuatro diputados de Vox y dando por hecho de que Podemos no le votará.
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Pumares, en la soledad que le supone ser el único diputado de su partido, quiere ser decisivo. «No votaremos a favor del candidato del PSOE, pero eso no quiere decir que no tengamos voluntad de llegar a acuerdos con el Gobierno que salga», dijo el diputado forista. «No queremos formar parte de este gobierno porque defendemos posiciones ideológicas contrarias. Pero sí queremos ser decisivos en los asuntos importantes de la región, como son los presupuestos o las leyes», añadió.
El socio prioritario del PSOE es Convocatoria por Asturias, la coalición formada por IU, Más País e Izquierda Asturiana que logró tres diputados el pasado 28 de mayo. Su portavoz y coordinador general de Izquierda Unida, Ovidio Zapico, ya lo había dicho el día después de las elecciones y ayer volvió a dejarlo claro: su formación «garantiza» a Adrián Barbón su investidura como presidente del Principado. «Vamos a votar a favor de él sin más contraprestación que la de evitar un gobierno del PP y de Vox en Asturias», dijo el líder de la coalición de izquierdas.
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¿Pero ese apoyo supone que Convocatoria por Asturias gobernará en coalición con el PSOE? No. Todo dependerá de las negociaciones que se lleven a cabo entre ambas formaciones. Sobre la mesa está esa posibilidad y, también, dejar a Barbón gobernar en solitario y alcanzar pactos puntuales. De momento, lo que ambos partidos están explorando es la primera opción. Y para ello llevan manteniendo conversaciones «discretas», como le gusta llamarlas al presidente del Principado en funciones.
Convocatoria por Asturias plantea que se revisen algunas de las leyes aprobadas en la pasada legislatura, especialmente la de calidad ambiental, y tener capacidad de decisión y gestión en áreas de gobierno vinculadas a la industria. «Queremos participar en los cambios reales que requiere Asturias», dijo Ovidio Zapico.
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Adrián Barbón no se saltó el guión establecido por él mismo sobre la «discrecionalidad» de las conversaciones que mantiene con todos los grupos, a excepción de Vox, para la investidura. Sí quiso agradecer especialmente el apoyo de Pumares a Juan Cofiño y también descartó que el acuerdo entre Foro y Vox para gobernar en Gijón con el apoyo del PP no condicionará los contactos que pueda haber a nivel autonómico. «Foro debe decidir qué papel quiere jugar en el ámbito autonómico, si en la región quiere tener un rumbo propio», dijo el jefe del Ejecutivo autonómico en funciones.
Hay un tercer partido que puede tener la llave para la gobernabilidad de Asturias los próximos cuatro años: Podemos. Su única diputada, Covadonga Tomé, defiende un gobierno desde la izquierda con el PSOE, Convocatoria por Asturias y su formación y advierte del riesgo que supondría si el PSOE se apoya en Foro. «En Gijón ya nos han dado muchas pistas de lo que son capaces de hacer y sería un esperpento pactar la gobernabilidad de Asturias con los socios de Vox», dijo. Tiende la mano de nuevo al PSOE para negociar un acuerdo de Gobierno, pese a que ayer votó en blanco en la elección de Cofiño.
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Si la formación del Parlamento dejó entrever ya las intenciones de cada grupo en el futuro pleno de investidura -debe celebrarse en un plazo máximo de dos meses que comienza a contar desde hoy mismo-, también muestra que entre la derecha hay algunas costuras. Unas más fáciles de coser, como es la relación entre PP y Vox, y otras a priori más complicadas, como es el roto que a nivel autonómico hay entre Foro y PP. El apoyo de Adrián Pumares a Juan Cofiño no gustó nada a Diego Canga, cabeza de lista del PP en las pasadas elecciones autonómicas y portavoz del grupo popular. Su malestar al respecto era palpable, pese a que no quiso valorar públicamente la decisión de Pumares. «No comentamos los votos de los demás grupos», dijo de mano Canga, para, a renglón seguido matizar: «Perdón, del diputado, porque no tiene grupo», dijo en alusión a que Foro, al haber obtenido solo un diputado, formará parte del Grupo Mixto junto a Podemos.
Canga sí quiso felicitarse por el aumento de diputados del Grupo del PP, que pasó de los 10 logrados la pasada legislatura con Teresa Mallada como candidata, a los 17 de ahora así como la presencia de dos diputados en la Mesa de la Cámara.
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Carolina López, portavoz de Vox, sí arremetió contra Adrián Pumares y su apoyo a la elección de Cofiño. «Ya nos tiene acostumbrados Foro a decir unas veces una cosa y luego lo contrario», dijo. Cabe recordar que Vox gobierna con Foro y el PP en Gijón. Lamentó la diputada de Vox que el PP no les haya cedido ningún puesto en la Mesa de la Cámara. «Ellos deberán explicar los motivos», añadió López.
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