Barbón defiende un «Estado federal simétrico» y la «vía fiscal asturiana»

De hecho, Barbón aludió en varias ocasiones al orgullo de ser asturiano y al efecto que sobre la autoestima han tenido «cuatro décadas de reconversión, muy duras, que han mellado la opinión de los asturianos sobre sí mismos». Por eso mismo también abogó por que «los asturianos volvamos a creer en nosotros mismos», y para ello esbozó un programa de gobierno en el que la apuesta por «la vía fiscal Asturiana» basada en la que la progresividad de los impuestos y en la redistribución que garantice una prestación de los servicios públicos a todos los ciudadanos, se sitúa como parte fundamental.

En la introducción que hizo el propio presidente a la charla, señaló que su acción de gobierno va orbitar sobre tres ejes fundamentales: «El cambio de modelo productivo de Asturias, el cambio de modelo social y dar una solución a la situación demográfica», que, indicó, serán una política de muy largo plazo, como lo está siendo en todos aquellos estados que están afrontando una problemática similar.

En cuanto al modelo productivo, Barbón recordó que aunque el 21 % del PIB asturiano era en 2021 de origen industrial, esta industria tiene que dar el paso a la digitalización y la economía verde ya ahora en los próximos años. De hecho, hizo un repaso por aquellos sectores en los que la transformación ya se ha ido imponiendo y recordó que Asturias, con un casi 10 % de empleo ligado a las nuevas tecnologías es la cuarta comunidad autónoma con mejor ratio en este sentido, solo por detrás de Madrid, Cataluña y el País Vasco.

En lo tocante al modelo social, insistió en la defensa de la igualdad de género como muro infranqueable, avanzó que se reorganizarán las áreas sanitarias, sin que ello suponga cerrar ningún hospital, sino «reducir la burocracia y afrontar la solución para las listas de espera y la atención a la salud mental».

También insistió notablemente en en la apuesta por la educación y la atención a los mayores, para los que se prepara un nuevo modelo asistencial para que puedan ser atendidos en sus propios domicilios, a la vez que se combate la soledad no deseada.

Por último, respecto al reto demográfico, subrayo que «no se resuelve en cuatro años» y abogó por que todo el mundo entienda que el enfoque «debe ser triple», entendiendo por ello, en primer lugar, una discriminación fiscal positiva para el emprendimiento y la fijación de población en el medio rural, en segundo lugar, un apoyo cada vez más, decidido a las medidas de fomento de la natalidad, y en tercer lugar, una preparación de las administraciones públicas a afrontar que el envejecimiento va a ser creciendo en Asturias, máxime con la llegada a la tercera edad de la generación del Baby Boom.

Barbón finalizó su intervención inicial recordando que Asturias fue la comunidad política que, como reino de Asturias surgió en primer lugar de todas las que hoy en día componen el Estado español, admitió que aunque hoy estamos mejor que ayer y que hace cuatro años percibe también miedo al futuro después de 40 años de reconversión durísima, y sobre sí mismo anotó que tiene la misma ilusión que hace cuatro años, o 50 meses que se cumplían hoy de su llegada al cargo, pero que también tiene «más experiencia al servicio de mi gran pasión que es Asturias».