Barbón califica de «ridícula» la petición del PP de que rompa con la extrema izquierda

Y esto es evidente tanto en el fondo como en las formas. A Barbón se le notó indignado con Queipo cuando habló esta mañana, en el Festival de la Sidra de Nava, de este asunto. En primer lugar, salió en defensa de su socio de gobierno sin tapujos ni medias tintas, y con intensidad en el tono de voz: «Nadie en su sano juicio piensa que IU sea una fuerza de extrema izquierda. Digo nadie porque ni el propio PP lo cree, hasta el punto de que quiero recordar que, quizá por la falta de experiencia del propio portavoz del PP, no recuerda que el PP, cuando gobernaba el Ayuntamiento de Oviedo en otra etapa pactó presupuestos con IU, o sea, que muy extrema izquierda no serían».

Y, de hecho, a continuación dio dos latigazos verbales al PP: «Es ridícula esa afirmación, sinceramente», dijo, sobre que IU pueda ser considerada de extrema izquierda, en lo que constituyó el primer latigazo. El segundo fustazo fue repetir el concepto de que a Queipo le falta experiencia y que «está tratando de desviar la atención, y lo que tiene que hacer es, repito y le doy una oportunidad una vez más, es, a pesar de su inexperiencia y de que no se atreva a dar esos pasos adelante, tiene que decir públicamente después de lo que hemos visto y de la inestabilidad que se ha generado en otras comunidades autónomas por ese conflicto entre PP y VOX, tiene que comprometerse como máximo dirigente del PP en Asturias a que nunca más va a haber pactos, ni de gobiernos de coalición, ni de pactos de investidura».

Esto es, no aceptar ni siquiera que Vox pudiera apoyar a un gobierno del PP aunque fuese sin acuerdo o sin ayudas puntuales en votaciones. Y Barbón remató: «y le reto a un paso más: tiene que romper los tres acuerdos municipales que mantiene en estos momentos en esos gobiernos de coalición en Asturias», en los ayuntamientos de Tineo, Castrillón y Amieva.

Y ello, porque «si no lo hace, estará fallando no solo al conjunto de la sociedad, que por supuesto, sino también a muchos votantes del PP que hoy están indignados y que creen, como yo creo, que fue un error que el PP pactara con Vox».

Por último, reiteró Barbón que «en el resto de Europa no pasa esto. Es decir, el PP europeo lo que hace es siempre aislar a la extrema derecha». Por si no quedase claro, el presidente asturiano subrayó que «el PP a nivel europeo lo acaba de decir, no van a acordar nunca con la extrema derecha y, sin embargo, aquí tienen un problema, así que le reto a que no busque excusas peregrinas», reiterando a continuación que IU no es un partido extremista.

Incluso dio un paso Barbón que habitualmente no se da en política, pero que responde al mismo que dio el sábado Queipo; decirle al oponente lo que debe hacer su partido. Y así, postuló que «lo que tiene que hacer como dirigente del PP es dar orden de que se rompan los acuerdos locales y garantizar públicamente que nunca va a acordar ni gobiernos de coalición ni pactos de investidura, es decir, que nunca va a aceptar los votos de la extrema derecha de Vox».

Por otra parte, Barbón condenó sin paliativos el atentado sufrido esta madrugada por Donald Trump, expresidente de EEUU y candidato a volver a la Presidencia por el Partido Republicano. Indicó el jefe del Ejecutivo asturiano que «con temas de la violencia política: esto es un atentado, y hay que ser contundentes y claros, no valen justificaciones por mucho que yo crea que Trump sería un mal presidente de los EEUU. No vale tener justificación alguna ante la violencia política. Yo la condeno expresamente, como han hecho el presidente Biden, el presidente Obama, el presidente Pedro Sánchez o el excandidato a las primarias demócratas».

Insistió Barbón en que «no cabe la violencia en la política, ni se puede cosificar a los dirigentes políticos», por lo que «me alegro enormemente de que el asesino no consiguiera su objetivo, porque sería malísimo para la democracia. Lo digo como lo siento».