Nuevo desvío de tráfico en el nudo de Serín para avanzar las obras

El objetivo de la nueva maniobra es dejar libre para los obreros la parte central de la calzada, por donde ahora continuarán los trabajos. La actuación, iniciada en 2019, parada en 2020, retomada en septiembre de 2023 y que sufrió un nuevo parón de semanas este año, tiene como objetivo solventar uno de los problemas que la 'Y' arrastra desde su inauguración en este punto, uno de los más utilizados de la infraestructura. La ladera contigua, conocida como La Tejera, tiene una composición de limos y arcillas de tal forma que el agua de lluvia se filtra en su interior y dilata parte de los materiales. Activa así un deslizamiento que presiona al firme de hormigón armado, hasta quebrarlo. Esa es la dinámica geológica que causaba el que era el bache más peligroso de la 'Y'.

Para resolver definitivamente el problema, el ministerio viene siguiendo un proyecto en dos fases. La primera consiste en quitar fuerza a la ladera, con una red de pozos drenantes a la que ahora, tras el modificado, se añadirá una cuneta de desagüe. El objetivo es que el terreno pierda fuerza. La segunda fase consiste en ir demoliendo el hormigón de la calzada, carril a carril, retirar el terreno desfragmentado que hay bajo él, reponerlo con nuevos materiales más estables y, finalmente, reconstruir el hormigón.