

Secciones
Servicios
Destacamos
Asturias sigue creciendo fuera de las fronteras de España. Fundamentalmente, lo hace ya con asturianos de segunda o tercera generación (o más), ésto es, hijos, ... nietos y bisnietos de emigrantes. Y lo hace a un ritmo notable. Si en el año 2023 se había incrementado en 4.068 personas su número, a lo largo de los doce meses de 2024 la cifra fue más de un 50% superior, al crecer en 6.443 personas en tan solo un año. Con esto, los registrados como españoles con procedencia asturiana en las delegaciones diplomáticas de nuestro país en el resto del mundo son ya 148.728, lo que representaría un crecimiento del 14,75% de la población asturiana (1.008.112 personas) si se diese un más que hipotético retorno repentino de todos ellos.
No será así, si bien es cierto que el Principado ha puesto en marcha un programa de acogida y captación del talento oriundo en el extranjero, así como programas como el ''Añoranza'', para ayudar a que los emigrantes nacidos en Asturias que han pasado su vida en el extranjero puedan venir a la región. En octubre pasado, por ejemplo, tres mujeres y dos hombres de entre 66 y 76 años, procedentes de Venezuela, Argentina y Uruguay, se pudieron reencontrar con sus familiares y sus raíces en Castropol, El Franco, Llanes y Tineo. Algunos de ellos llevaban más de 70 años sin pisar Asturias.
La mezcla de efectos de varios fenómenos demográficos, por otra parte, ha llevado a que cinco de los 78 concejos de que se compone Asturias tengan hoy más población registrada como oriunda en el extranjero que vecinos empadronados en el propio concejo. Se trata de las dos Peñamelleras y Ponga, en el Oriente, y de Pesoz y Allande, en el Suroccidente. Precisamente, Pesoz, que figura en el último padrón oficial como el concejo asturiano menos poblado, con 135 habitantes viviendo en este territorio del curso medio-alto del Navia, cuenta con nada menos que 223 españoles residentes en el extranjero que se declaran originarios de Pesoz, en el que es el caso más extremo. Si sumásemos ambas cifras, Pesoz tendría 358 habitantes y devolvería a Yernes y Tameza, con mucha menor presencia en el extranjero, el título de concejo menos poblado, ya que este municipio del centro de la región pasaría de 136 a 184, solamente.
En el caso de Allande, pasaría de sus 1.530 vecinos actuales a nada menos que 3.807; Peñamellera Baja, de 1.188 a 2.746; Peñamellera Alta, de 518 a 1.233, y Ponga, calificada por los criterios sociológicos como un desierto demográfico con sus 576 vecinos actuales, recuperaría potencia socioeconómica con 1.346 vecinos.
Hay otros 18 concejos que en el caso de la antedicha hipótesis de un retorno masivo inmediato de todos sus 'vecinos del extranjero' verían incrementada su población en más de un 50%. Un 50,05% crecería, por ejemplo, Somiedo, si a sus 1.065 vecinos actuales hubiese que sumar repentinamente a los 533 somedanos del exilio. Por encima de ese 50% se encuentran, además de Somiedo, su vecino Belmonte de Miranda (la cuenca del Pigüeña), la cuenca media y alta del Navia (Villalón, Boal, Illano, los tres municipios de Los Oscos, Taramundi y San Tirso de Abres, en el Occidente de la región, mientras que en el Oriente se sitúan el resto, con Cabranes, Caso, Amieva, Cangas de Onís, Onís, Cabrales, Llanes y Ribadedeva.
Llama la atención el caso de Llanes, que pese a su potencia económica sigue teniendo una población emigrante que equivale al 73,53 de la que vive en el concejo asturiano. Si en el municipio turístico oriental viven hoy 13.549 vecinos, los llaniscos emigrantes y sus descendientes siguen siendo nada menos que 9.962.
En el extremo contrario, los concejos del 'Ocho central', aunque con matices. Todos aquellos municipios que durante el desarrollismo recibieron una intensa afluencia de población, fundamentalmente de León, Galicia y Extremadura (Gijón y Avilés en particular, pero también los concejos más poblados de las cuencas mineras) mantienen hoy un nivel de población que hace que los emigrantes y sus descendientes, incluso siendo numerosos en algunos casos, representen porcentajes bajos respecto a la población actual. El ejemplo más extremo de esto sería Oviedo, con 39.245 personas que figuran como oriundas del concejo en el extranjero. Pero esto es muestra más de un defecto de los registros que de otra cosa, puesto que muchos emigrantes fueron registrados como oriundos de Oviedo como provincia y no como concejo, sin que se resolviese posteriormente el error.
Gijón, por ejemplo, cuenta con 18.841 personas que figuran registradas como gijoneses en el extranjero, siendo este contingente el más elevado tras el ya mencionado de Oviedo, pero esta cifra sólo equivale a un 6,88% de la población actual de la capital de la Costa Verde. Claro que hay que recordar que Gijón, antes del desarrollismo, apenas rozaba los 50.000 habitantes. En el caso de Avilés, el efecto del desarrollismo es aún más claro. Los 3.527 'avilesinos de la diáspora' apenas representarían un 4,68% adicional si se sumasen a los 75.351 que viven hoy en la Villa del Adelantado.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Descubre la fruta con melatonina que te ayudará a dormir mejor
El Diario Vasco
Multas por las gallinas 'sin papeles'
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.