Asturias prepara el 8M más combativo marcado por las leyes 'trans' y del 'solo sí es sí'

La villa de Jovellanos ha sido elegida por el Principado para celebrar la actividad oficial. Bajo el lema 'Más que nunca, 8M', el Gobierno regional ha fijado la mañana para desarrollar su agenda y que ningún acto colisione con la protesta en la calle. Así, la tarde queda para la manifestación que organiza la Plataforma Feminista, entidad que aglutina a la mayor parte del movimiento feminista asturiano.

A partir de las 19 horas comenzará el recorrido por las calles de la capital del la cuenca del Caudal. En el aire, pendiente de debate y confirmación, está la convocatoria, para ese mismo día, de dos horas de paro para los considerados colectivos esenciales y una huelga, esa de carácter general, en educación.

El Principado ultima el cartel oficial, cuyo boceto presentó el pasado día 13 al Consejo Asturiano de la Mujer. Insiste en la idea de que el 8M, o las reivindicaciones que la cita incluye, son más importantes hoy que nunca. La Plataforma Feminista, por su parte, ya ha dado a conocer el suyo. Diseñado por la ilustradora asturiana María Ortiz, destaca el eslogan, ese 'Compañera dame tira', como símbolo de la unidad. Hasta el punto de salida ha querido ser simbólico: el Pozu Barreo.

Porque todas las entidades feministas asturianas tienen claro que el de este año no será un 8M más. Después en el arrollador Día Internacional de la Mujer de 2018, con paro casi generalizado en España y miles de personas en las calles de todo el país, la tramitación de dos leyes, la de Garantía Integral de la Libertad Sexual, primero, y la de Igualdad Real y Efectiva de las Personas Trans y para la Garantía de los Derechos de las Personas LGTBI, después, más conocidas como del 'solo sí es sí' y 'trans', han ido erosionando la unanimidad, y con ella la fuerza, que el movimiento feminista mostró hace cinco años.

Hasta el punto de que la participación en las acciones convocadas para reivindicar la igualdad o el fin de la violencia ha ido a menos, cuando no han chocado entre sí. Como ejemplo, lo ocurrido el pasado 25N en Asturias. Aunque se mantuvo el acuerdo no escrito de que, en el Día Internacional contra la Violencia sobre la Mujer, los actos oficiales se celebran por la mañana y la manifestación, por la tarde, en Gijón se convocaron protestas a la misma hora que la marcha feminista que recorría Avilés.

Y por si fuera poco, el 8M de 2023 llega en la antesala de una larga carrera electoral. Las autonómicas y municipales, en mayo, y las generales, probablemente en diciembre, lleva a que todas las formaciones quieran pescar votos en el caladero feminista.

Con todos estos mimbres, el próximo Día Internacional de la Mujer «será el más reivindicativo», apuntan casi de forma unánime las portavoces de la Plataforma Feminista, Jessica Castaño; de 8M Asturias, Alejandra Matallanas; de la Federación Asturiana de Mujeres Progresistas, Blanca Aranda, y de la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (Acai), Blanca Cañedo-Argüelles. Todas ellas integrantes, a su vez, de la Plataforma Feminista.

También está de acuerdo en la reivindicación la presidenta de una de las entidades con más solera, la Tertulia Feminista Les Comadres que el pasado día 16 repartió su premio, la Comadre de Oro, y su castigo, el Felpeyu. «El 8M es una jornada de reivindicación y lucha por la agenda feminista», recalca su presidenta, Begoña Piñero. A nivel personal, Piñero aplaude «el lema de la manifestación, 'Compañera, dame tira', me parece un acierto».

Un lema que esconde mucho más de lo que dice. Con él, el feminismo asturiano quiere mostrar «su unidad. En Asturias, a pesar de las discrepancias, intentamos reforzar el mensaje de trabajar por lo que nos une», asegura Blanca Cañedo-Argüelles. Palabras que respalda Alejandra Matallanas. «El feminismo asturiano es fuerte. El lema 'Compañera, dame tira' representa el apoyo y la solidaridad que hay entre nosotras», afirma.

Una idea que recalca la presidenta de la Federación Asturiana de Mujeres Progresistas. «Entre las feministas hay debate sobre estas dos leyes, pero no división. Esa la fomenta la derecha, porque es lo que quiere», afirma Blanca Aranda. «Nuestros enemigos son los proxenetas, los compradores de bebés y las personas que no son feministas. Me niego a pensar que no puede existir diálogo entre las feministas», remata Jessica Castaño.

Un mensaje, el de la unidad incluso desde la discrepancia, «que está prendiendo. Cuando pedimos tira, tenemos al lado una feminista que nos ayuda para seguir creciendo», afirma Cañedo-Argüelles. Tanto ha prendido, refuerza su tocaya Aranda, «que Asturias es la única comunidad donde habrá una manifestación con convocatoria única y unánime».

No obstante, todas insisten en ser consciente en que la aprobación de ambas leyes está abriendo una brecha. La más importante, por los pasos políticos pendientes, la creada por la rebaja de condenas a los violadores gracias al recorte de penas que trae consigo la ley del 'solo sí es sí'. El PSOE ha presentado una modificación que no apoya Unidas Podemos y que se debatirá en el Congreso el 7 de marzo. «Es una ley muy buena, por la protección a la víctima, pero está claro que tiene fallos que hay que solucionar», sentencia Aranda.

En dos semanas llegará la prueba del algodón a esa unidad de la que habla Asturias. En un 8M que, más que nunca, necesitará que las compañeras den tira.