Asturias abre el año con los virus respiratorios disparados

Asturias es, de hecho, la comunidad autónoma con mayor tasa de ingresos hospitalarios por infecciones respiratorias, provocadas en la mayoría de los casos por la gripe A, cuya incidencia se ha duplicado en las últimas cuatro semanas, según datos del Ministerio de Sanidad. Un brote que convive con un incremento de los contagios de coronavirus, derivado de la mayor interactividad social inherente a las fiestas navideñas, dando lugar a una presión asistencial que está desbordando los servicios de urgencias en las áreas sanitarias más pobladas.

Médicos de Atención Primaria aseguran que. debido fundamentalmente a la gripe A –la tipología predominante este invierno–, la actividad en los centros de salud ha aumentado en torno al 40%. «La gripe está viniendo fuerte, con mucha más fiebre que otros años y como en dos fases. Cuando parece que se mejora, vuelves a estar mal otros tres o cuatro días, y eso descoloca a los pacientes», explican. «Pero no hay por qué alarmarse salvo que los síntomas se recrudezcan o se prolonguen en el tiempo, aparezca fatiga o la fiebre sea persistente», añaden.

Que la gripe A «viene fuerte» este invierno lo saben bien en los hospitales asturianos, donde se han disparado los ingresos por infecciones respiratorias y neumonías. En el servicio de Urgencias del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en concreto, «esta ha sido la peor semana de la historia», con un número de pacientes que supera todos los registros. Entre el lunes y el viernes, en el cuartel general de la sanidad pública asturiana se atendieron más de 2.200 emergencias, con un pico el martes de medio millar. «Estamos a tope», constata el personal.

En la semana previa a Nochebuena, los pacientes que ingresaban a través del servicio de Urgencias llegaron a esperar hasta seis horas por una habitación en la planta del hospital. La Consejería de Salud ha reducido la actividad quirúrgica programada, que según los facultativos «está ahora en mínimos», para no colapsar los hospitales con mayor demanda asistencial. Además, en el HUCA, se prevé reforzar el servicio de Urgencias en los próximos días con más celadores. «Con tanta gente necesitamos más de los habituales», precisan fuentes hospitalarias.

Ante esta situación epidemiológica, las autoridades sanitarias asturianas han decidido ampliar la campaña de vacunación –que iba a finalizar el viernes– hasta que el virus influenza pierda fuerza. Dicha campaña está dirigida a los mayores de 60 años, a los enfermos crónicos, a los pacientes inmunodeprimidos, a las embarazadas y este año también a los fumadores y a la población infantil de entre 6 meses y cinco años.

Hasta la fecha, en Asturias se han inmunizado contra la gripe estacional cerca de 240.000 personas, cifra que está muy lejos de las 514.000 dosis adquiridas por el Servicio de Salud del Principado (Sespa), que insiste en recomendar a los grupos de riesgo que se vacunen. La profilaxis, recuerdan los médicos, no evita que las personas se contagien de gripe, pero sí reducen la carga viral circulante y la gravedad de los procesos infecciosos.

El HUCA, sin antivirales

Algo que resulta fundamental en momentos como este, en el que las cepas predominantes se manifiestan con sintomatología más severa, generando una alta tasa de casos graves e ingresos hospitalarios. Casos en los que la Farmacia del HUCA no dispone de los antivirales que suelen recetarse –por ejemplo, a pacientes trasplantados– para evitar que la infección por gripe vaya a mayores. Las familias se ven obligadas a comprar este medicamento en farmacias externas al hospital, para que el personal sanitario pueda administrárselo al enfermo durante su estancia en planta.