Asturias invirtió 56 millones para rehabilitar fachadas

El Idae recibió, hasta mayo del año pasado, 1.081 solicitudes para percibir la ayuda estatal. Y de ellas, 204 fueron solicitadas por el Principado. Tan solo el País Vasco, con 363 obras, acumuló un mayor número de actuaciones financiadas para la rehabilitación de fachadas.

En cifras globales, se destinaron cerca de 302 millones para toda España, y casi 56 millones fueron para Asturias. Desde el punto de vista de la inversión por habitante, en el país la media es de 11,82 euros, mientras que en la región asciende hasta los 54,42 euros por asturiano. Solamente Navarra, con una media de 61,09 euros y el País Vasco, con 56,19 euros, superan al Principado en inversión por habitante.

Entre estas cifras también destaca que, de esas 204 obras financiadas en la región, 133 de ellas se solicitaron en Gijón, con una inversión en la ciudad de 32,7 millones, doce de ellos percibidos a fondo perdido. Esto, recordó García Rama, «no es fruto de la casualidad. Es fruto de las políticas que se han hecho en las últimas décadas», y puso como ejemplo la rehabilitación llevada a cabo en la fachada marítima del Muro de San Lorenzo, en la Avenida de Rufo García Rendueles, con una actuación para «conservar el patrimonio y que además supone un ahorro energético».

El proyecto Gelclad, en el que García Rama es la única empresa española, consistió en el desarrollo y producción de un nuevo sistema de aislamiento de fachadas. Durante los tres últimos años, el objetivo ha sido desarrollar materiales y sistemas alternativos para la rehabilitación de fachadas en edificios con los que se «mejoren las prestaciones de lo que ya existe en el mercado».

Por su parte, Jorge Corker, coordinador de Gelclad, comentó, en el salón de recepciones del Ayuntamiento de Gijón, que este sistema contribuye a «la reducción del consumo de energía y las emisiones de CO2», ya que se gana hasta «un 40% de eficacia aislante».

Desde el Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (IDEPA) también se valoró la presencia asturiana en este proyecto. Eva Pando, su directora general, afirmó que «una empresa familiar -García Rama- demostró que se puede salir reforzado de una crisis -la que afectó al sector de la construcción- invirtiendo y apostando por la innovación».

Finalmente, Ana González, alcaldesa de Gijón, aseguró que la ciudad «todavía necesita renovar muchas fachadas e interiores» y apostó por «un proceso de transformación que cause el menor impacto posible en el entorno».