Óscar Puente califica de «grave» el desprendimiento aunque valora que «las primeras inspecciones son tranquilizadoras»

Según fueron trascurriendo las horas, y tras los primeros trabajos de verificación de Guardia Civil y Bomberos de Asturias, el ministro se manifestó algo más optimista: «Las primeras inspecciones son tranquilizadoras. Parece que no hay nadie sepultado por el desprendimiento. Las labores de retirada del material han comenzado», manifestó.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, también ha reaccionado a través de su cuenta en la misma red social asegurando que «estamos a la espera de conocer si hay víctimas, aunque las primeras informaciones indican que no».

Hasta la zona se ha desplazado la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, y el consejero de Fomento asturiano, Alejandro Calvo, para hacer una valoración in situ de las dimensiones del siniestro. «Después de los trabajos de verificación del GREIM, los Bomberos de Asturias con sus equipos caninos, drones y cámaras térmicas y Aucalsa a través de las cámaras existentes en la autopista, creemos que no hay ningún vehículo enterrado en el desprendimiento, que no hay ninguna persona atrapada». A pesar de esta primera buena noticia, Lastra pedía «prevención» porque «hasta que no levantemos todo», indicó, no se puede confirmar con la seguridad que requiere.

El desprendimiento, que ha tenido lugar en las proximidades del Negrón, moviliza todos los recursos disponibles. La Guardia Civil desvía el tráfico tanto en Lena como en La Magdalena por la antigua carretera de Pajares (N-630). Asimismo, la evacuación de los vehículos bloqueados en la vía a raíz del argayo se dio por finalizada a las 12.30. Los afectados por el corte en sentido León (parte asturiana) fueron 145 turismos, 14 camiones y dos autobuses que llevaban pasajeros.

Hasta el lugar del siniestro se han desplazado efectivos de varias patrullas de seguridad ciudadana de la Guardia Civil de zonas cercanas, así como del Greim de Mieres con un perro de búsqueda de personas desaparecidas en grandes áreas. De los testimonios recabados por los agentes en la zona a los testigos, no parece probable que haya quedado atrapado ningún vehículo bajo el argayo.

Según las primeras valoraciones, las grandes dimensiones del desprendimiento conllevarán «semanas o meses» de obras para dejar expedita la principal vía de comunicación entre Asturias y la meseta, con los perjuicios que ello genera en el transporte de mercancías y viajeros y para los usuarios de la autopista asturleonesa.