«En dos años he tenido covid tres veces»

No se lo podía creer. Por tercera vez desde la llegada de la pandemia de coronavirus a España, una PCR le dejaba claro que lo que él creía que era un catarro era covid. «¡Por tercera vez. Ya no sé qué hacer!». No hay sido un falso positivo como no lo fueron las dos veces anteriores. «En dos años he tenido covid tres veces». Nano Vallina lo cuenta con una tranquilidad -«no tengo síntomas»-, no exenta de preocupación, como «sigo a la espera de que Salud me haga un estudio. No sé si lo mío es covid persistente, si son diferentes infecciones, no sé nada de nada».

Lo único que tiene claro es que se ha pasado confinado otros diez días, «y eso después de cuatro test de antígenos que dieron negativo». Todo comenzó por el contagio de un amigo y la PCR oficial le volvió a la primavera de 2020. Y al verano de ese mismo año. En ambas ocasiones, Vallina, encargado en aquel momento de La Buena Vida de Fomento, dio positivo. «La primera vez sí me encontré mal. Tenía dolor de cabeza y estaba muy cansado, además de que perdí el olfato».

No llegó a necesitar hospitalización, pero sí confinamiento y tratamiento. Con la recuperación, se creyó protegido. «Nos decían que los enfermos de covid teníamos inmunidad por seis meses».

Pero no le duró tanto. En julio del año pasado fue la cabeza visible del mayor brote registrado en la hostelería gijonesa. «Hubo mucha gente que me culpó a mí, pero yo cumplí en todo momento con las normas». Una escapada a Madrid con amigos supuso el contagio y volvió a dejarle fuera de juego. Su recuperación, así como la reapertura del local, fue celebrada el 10 de agosto con una gran fiesta en apoyo a la hostelería. «Porque es un sector muy castigado y señalado sin ningún motivo».

Aunque ahora ya no pertenece a él, «me he pasado al sector de la seguridad», Vallina defiende que «la hostelería es segura. Se cumplen todas las normas que se han impuesto. La limpieza y la higiene es continua y, desde luego, mucho más que en otros lugares donde también acude mucho público». Recuerda que «la hostelería da mucho empleo y riqueza a la región. Cada vez que se la señala se ponen en peligro muchos puestos de trabajo».

Y es en este momento, fuera del sector hostelero, cuando ha vuelto a enfermar. «Dio positivo un amigo y yo me hice hasta cuatro test, pero todos dieron negativo». Fue la PCR la que le volvió a dejar en su casa. «No sé ya qué hacer. No tengo ningún síntoma y, la verdad, si no fuera por el apoyo de mi médica de familia, me sentiría abandonado».

Es ella la que le ha acompañado «todas las veces que di positivo, pero no me ha llamado nadie del Sespa (Servicio de Salud del Principado) para hacerme un seguimiento completo. No sé si tengo covid persistente o si son infecciones diferentes. Creo que si alguien da positivo tres veces, en algún lugar debería saltar una alarma y plantear que esa persona sea analizada».

Sobre todo si, además, «está vacunada, como estoy yo». Porque esa es otra de las preocupaciones que tiene Vallina. «Entre las dos covid previas y la vacunación pensé que ya estaba protegido, pero veo que no». Ya que, insiste, «yo he guardado todas las medidas de precaución».

Ahora, con la tercera covid superada, ya percibe cambios en su organismo. «Me canso muchísimo. Hago deporte y me cuido, pero me ahogo al subir las escaleras, por ejemplo, cosa que antes no me pasaba». Por eso, insiste en su mensaje. «Creo que el Sespa debería hacer un estudio en personas como yo, con tres infecciones en dos años y sin saber el motivo». Considera que «es necesario saber cómo nos va a afectar este virus y qué consecuencias a largo plazo nos puede generar a quien, como a mí, nos ha atacado tantas veces».

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