«Amaya, gracias por todo lo que nos diste, nunca te olvidaremos»

Sus compañeros le rindieron homenaje. «Amaya, gracias por todo lo que nos diste y lo que nos enseñaste. El ejemplo de tu vocación y de tu capacidad para no rendirte ante la adversidad pervivirá entre nosotros», expresaba el consejero de Salud, Pablo Fernández. «Nunca te olvidaremos», subrayó.

Rizzo fue tutora de muchos residentes, incluido Fernández. También de José Carlos Fernández, jefe de Cirugía General y Digestiva en Cabueñes. «Era una persona con carácter y energía, nos daba caña para que aprendiésemos», recuerda José Carlos. Los pacientes, cuenta, le tenían mucho cariño, era muy profesional y cercana. «También era querida y respetada por sus compañeros», destaca. Una de ellas es María Luisa Tamayo que ejerce como jefa del Servicio de Atención al Ciudadano del Área Sanitaria V, de Gijón. Tamayo la conoció cuando trabajaban juntas en el HUCA. Además del ámbito profesional, María Luisa Tamayo tuvo trato con ella como familiar de uno de los pacientes que atendía. «En las dos vertientes era una magnífica, buena profesional y mejor persona», destaca.

Lino Vázquez también trabajó directamente con ella en el HUCA. En este hospital, Vázquez ejerció como jefe del Servicio de Cirugía. Ahora, está jubilado. «A Amaya nada se le ponía por delante», sostiene. Rizzo contaba con el reconocimiento de sus compañeros y pacientes por ese papel de cirujano todoterreno, subraya Vázquez. «Tenía una formación quirúrgica clásica, con capacidades múltiples y con un entusiasmo al que no renunciaba nunca para enfrentarse a los problemas de los pacientes», sostiene. Hoy a las 19 horas tendrá lugar el funeral en la Iglesia Santa María de La Fresneda.